Los autores de un tiroteo en la zona de copas de La Felguera en verano de 2017 se enfrentan a penas de hasta 11 años de prisión. Esto es lo que solicita la acusación particular, que sienta en el banquillo a tres personas: D. H. H., a su hermano J. R. H. H. y al padre de ambos, D. H. P. Los considera autores de un delito de homicidio en grado de tentativa, por el que pide 9 años, más otros 2 por un delito de tenencia ilícita de armas. La Fiscalía, por su parte, solo acusa a los dos hermanos, solicitando penas de 9 y 7 años de cárcel, por un delito de lesiones y tenencia ilícita de armas. La pena para D. H. H. es dos años más dura porque se añade un presunto delito de conducción temeraria: huyó a toda velocidad de la policía cuando quisieron detenerle.

El Ministerio Fiscal sostiene que, sobre las cinco de la mañana del 9 de julio de 2017, la víctima acudió en compañía de otras dos personas al domicilio del principal acusado, D. H. H., en La Felguera, con la intención de comprar droga. Esto provocó que el acusado saliera de su domicilio y, tras golpear a uno de los acompañantes, efectuara varios disparos al aire con una pistola, al tiempo que les decía "cago´n en vuestra raza, a qué venís a las cinco de la mañana". Entonces, la víctima y sus amigos abandonaron la zona, y a continuación se dirigieron a un pub en la calle Círculo Popular de Langreo, lugar al que instantes después llegó también el principal acusado, portando un arma con la que encañonó a la víctima. En ese momento pudieron ser desalojados del local sin más consecuencias.

Sin embargo, y tal y como recoge el escrito de acusación, minutos después, D. H. H. regresó nuevamente al pub, haciéndolo esta vez en compañía de su hermano, J. R. H. H., ambos armados "con palos, dirigiéndose los dos hacia el lugar donde se encontraba" el joven que resultó ser la víctima. Los dos acusados comenzaron a agredir al hombre, que cayó al suelo. Al intentar incorporarse, "recibió tres disparos", que la Fiscalía achaca al hombre al que despertaron, no a su hermano. Dos de los tiros fueron en la pierna izquierda y un tercero en la pierna derecha. El arma se encasquilló, de manera que el agresor no pudo seguir disparando, "abandonando apresuradamente los dos agresores el local".

Al día siguiente, sobre las 10:30 horas, el acusado principal circulaba en un vehículo Opel Vectra en el distrito de Lada, cuando fue visto por una patrulla de la Policía Nacional, que le dio el alto, utilizando las luces y las sirenas de su vehículo. Pese a ello, "el hombre hizo caso omiso a la advertencia e inició una huida a una gran velocidad por la carretera de San Tirso en dirección a Mieres, poniendo en peligro al resto de vehículos que se cruzaban con el mismo, dado lo estrecho de la carretera". La patrulla lo perdió de vista dada la velocidad a la circulaba, pero fue localizado posteriormente por otra patrulla en el Polígono de Riaño II, donde siguió con su conducción a gran velocidad. Varios trabajadores tuvieron que apartarse para evitar que los arrollara.

De esta forma, ambos acusados responderán de un delito de lesiones y tenencia ilícita de armas. D. H. H., además, se enfrenta a un delito de conducción temeraria. En total le piden 9 años de cárcel, por 7 años para su hermano. Se pide también una indemnización para la víctima.

La versión de la acusación particular es muy parecida, pero incluye entre los acusados al padre porque considera que ayudó a propinar la paliza y a pegar los tiros con una pistola "marca Búfalo, calibre 7,65". Detalla además con más precisión las múltiples lesiones que ocasionaron a la víctima, y estima que el delito principal es el de homicidio en grado de tentativa (9 años). En caso de ser condenados por lesiones agravadas, pide 5 años. Otros dos se solicitan por tener el arma ilegalmente.

El juicio es hoy en Langreo, y se prevén fuertes medidas de seguridad.