Fueron más de centenar y medio los inscritos que ayer dieron zancadas para que el grado de Deportes corra hacia Mieres. De todas las edades. Y de buena parte de Asturias. Sin ir más lejos, el ganador de la prueba, Raúl Bengoa, llegaba desde Llanes.
Un mierense que se vistió de corto fue Samuel Ovalle, que tiene claro hacia dónde debe ir la titulación deportiva: "Está bien tener el grado de Deportes en Mieres porque tenemos el campus un poco abandonado". Una titulación más, dijo, "siempre vendría muy bien, tenemos unas muy buenas instalaciones y se agradecería tener más alumnos y más compañeros, cosa de la que últimamente estamos escasos".
Desde Lugones llegaba Eva María Iglesias a participar en esta carrera. Mientras estira los músculos antes de comenzar la prueba señala que actos como el de ayer, "son lo que necesita Asturias, que la gente joven se mueva por lo que quiere". Respecto a la llegada de la nueva titulación a Mieres, Iglesias lo tiene claro: "Creo que está bien que haya dispersión, y que no todo esté concentrado en Oviedo, Gijón y Avilés. Las Cuencas están quedándose muertas y más estudiantes van a ser una ayuda".
Otra mierense que acudió veloz a la cita con la defensa del campus fue Conchita Suárez: "Hay que moverse, que vengan más estudiantes, hay que dar vida a estas instalaciones tan magníficas que nos han hecho aquí".
Y paradójicamente, también llegaban apoyos desde Gijón. José Ramón Muñiz, del club Santa Olaya, señalaba que "me parece estupendo que Deportes venga para Mieres, hay unas instalaciones para muchos más alumnos de los que hay ahora, están nuevas y podrían albergar el grado perfectamente". Deportividad absoluta.
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