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Un conflicto en el tejido empresarial de la comarca

"Alertamos del fraude, pero nadie nos escuchó", dicen extrabajadores de Triman

La plantilla avisó "en varias ocasiones" a las administraciones y a los sindicatos de "las maniobras" de la gestión: "Contrataban aun teniendo pérdidas"

"Alertamos del fraude, pero nadie nos escuchó", dicen extrabajadores de Triman

La plantilla de Triman Minerals -con plantas en los polígonos de Vega de Arriba y Loredo- avisó "en varias ocasiones" a las administraciones y a los sindicatos, y antes de que se presentara un concurso de acreedores, de un posible fraude en la compañía. "No había explicación para algunas decisiones, como contratar más personal cuando decían que había pérdidas", señalaron. Ahora, el informe de la administración concursal les da la razón: Triman Minerals enajenó patrimonio y duplicó facturas para "fingir una situación patrimonial ficticia". "Nosotros avisamos, pero nadie nos hizo caso", clamaron ayer los extrabajadores.

El conflicto entre Triman Minerals y la plantilla, sobre todo con los trabajadores que aún permanecen en la firma, es muy enconado. De hecho, hay varios procesos judiciales abiertos. Algunos empleados denunciaron a la empresa por los impagos que ya alcanzan un año de salarios. También se querellaron por los despidos y por la propuesta para la extinción de contratos. Pero si hubo un procedimiento que llamó la atención, por inusual, fue el de la denuncia de varios trabajadores contra el delegado sindical de UGT.

Los demandantes aseguraban que, para asegurarse del éxito del ERE, desde la dirección de la empresa "se consigue la colaboración del citado delegado, que se presta a ello traicionando a sus intereses de clase y a sus compañeros". Y hubo más engaños, añadieron, como el de "dos trabajadoras a las que se les promete su posterior readmisión para que voten a favor del despido colectivo". Estas dos empleadas fueron incluidas, siempre según la versión de los denunciantes, "para alcanzar el número de despidos marcado por ley en la figura de despido colectivo que se siguió".

Pero no es la única queja entre la plantilla. Los trabajadores, tras conocer el informe de la administración concursal que hizo público LA NUEVA ESPAÑA y que describe maniobras para "falsear" las cuentas ante los acreedores, aseguran que la situación en la empresa era complicada desde hacía mucho tiempo. Y que así lo hicieron constar en varias ocasiones: "Se les hizo llegar a los sindicatos, tanto a Comisiones Obreras como a UGT, las maniobras de la gestión que nos parecían alarmantes". Como la ya citada contratación de personal sin tener suficiente carga de trabajo, o la cancelación de pedidos sin explicaciones para la plantilla.

La respuesta de UGT, siempre según la versión de antiguos empleados, "no fue más que ofrecer servicios jurídicos individualmente a cada trabajador". Comisiones Obreras sí elaboró un informe pero, desde el punto de vista de la plantilla, "fue muy poco contundente y no era una denuncia como tal y no sirvió para nada. Ni un sindicato ni el otro plantó cara a los administradores de la firma".

Dicen que se han sentido "abandonados". Y no sólo por las centrales. Según su versión, tampoco encontraron apoyo "en ningún grupo político con representación en el Ayuntamiento de Mieres". Tampoco en el Principado, a pesar de que intentaron contactar sin ningún éxito con responsables de la Consejería de Empleo. "Nos resulta muy llamativo que luego todos alcen la voz para asegurar que buscan alternativas", sentenciaron. Mientras que ellos intentaban salvar el ERE, denunciaron ayer, "el Pleno de Mieres aprobaba una moción para salvar a Alcoa".

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