La casa de Ulpiano Sánchez Hevia, minero retirado residente en La Xerra (Laviana), parecía en la mañana de ayer una zona de guerra o el escenario de una película postapocalíptica. Restos de ladrillos, madera y enseres rodeaban la vivienda, tras venirse abajo la techumbre y parte de la fachada como consecuencia del devastador incendio que se declaró de madrugada. Sobre la una de la tarde, tras nueve horas de intervención, los bomberos hallaron los restos mortales del hombre completamente calcinados, hasta el extremo de que fueron retirados en bolsas. A la espera de las pruebas de ADN que se realizarán para confirmar la identificación, se cree que corresponden a Ulpiano Sánchez, que tenía unos 65 años y vivía solo en la casa. La vivienda quedó arrasada.
El Centro de Coordinación de Emergencias del 112-Asturias recibió el aviso a las 03.52 horas de esta madrugada. La llamada la realizó un familiar, desde otra localidad, que fue alertado por los vecinos del afectado. En el aviso se informó de que estaba quemando una vivienda de dos alturas, que no había casas anexas y que desconocía si su familiar se encontraba en el interior, indicaron ayer responsables del Servicio de Emergencias el Principado de Asturias (SEPA).
El fuego pudo empezar bastante antes, pero la alerta de los vecinos llegó al percibir un gran estruendo, causado probablemente por el desplome de la techumbre, según explicó el alcalde de Laviana, Julio García, que se desplazó al lugar del siniestro a primera hora de la mañana para seguir las labores de los bomberos. "Es una casa de piedra con entramado de madera. Los expertos nos han dicho que, en una situación así, se pueden llegar a alcanzar temperaturas de más de 400 grados. No hay viviendas anexas, así que el incendio no pudo propagarse", relató el regidor.
Extinción
Hasta la zona se trasladaron bomberos de los parques de San Martín del Rey Aurelio y La Morgal, junto al Jefe de Zona Centro. Cuando la primera dotación llegó informó de que la casa estaba totalmente en llamas y derruida, señaló el SEPA. Los bomberos, a los que posteriormente se sumaron dotaciones de Proaza y Coballes, tuvieron que trabajar con los equipos de respiración autónoma ya que tuvieron que ir removiendo poco a poco los escombros para refrigerar y extinguir el fuego. El incendio quedó controlado sobre las 8.00 horas, pero la intervención se prolongó durante cinco horas más, para tratar de localizar al propietario de la casa. A las 13.16 horas, comunicaron que había indicios de que el inquilino de la vivienda podría estar en su interior.
Miembros de la Policía Judicial de la Guardia Civil se hicieron cargo de la investigación, aunque también se desplazaron a la zona Policía Local y los servicios médicos, así como algunos vecinos que acudieron a interesarse por lo ocurrido. El levantamiento del cadáver se produjo sobre las 16.30 horas. Está previsto que en la jornada de hoy se complete la autopsia para identificar los restos.
Los destrozos generados por el fuego dejaron la casa prácticamente en ruinas. Como precaución y ante el riesgo de accidentes (la vivienda está ubicada en las inmediaciones de la carretera que conecta el pueblo con Boroñes y El Condao) el Ayuntamiento tenía previsto derribar en la tarde de ayer los restos del inmueble próximos a la calzada, afirmó el alcalde de Laviana, que destacó la labor realizada por los bomberos desplazados a la zona.
