Miedo en Rioturbio. Tres personas están "atemorizando" a hosteleros y vecinos de la localidad mierense. Se trata de dos hombres y una mujer, uno de ellos identificado como uno de los "Jamoneros" -así se conoce a una pareja de hombres de mediana edad y etnia gitana que llevan meses sembrando el pánico en el municipio-. Según ha podido saber este diario, en la última semana la Guardia Civil ha tenido que intervenir en varias ocasiones por presuntas amenazas y disturbios en la localidad. "Estos últimos días han sido de tensión y, por qué no decirlo, también de miedo", confirmaron fuentes vecinales a LA NUEVA ESPAÑA. Los representantes de la localidad han solicitado ya encuentros con responsables de las fuerzas de seguridad.

"Nos sentimos atemorizados". Es la sentencia que más se repetía, ayer, en las calles de Rioturbio. Los problemas comenzaron hace ya unas semanas. "Hace algún tiempo que se palpa la tensión en el ambiente y la situación está empeorando día a día", destacaron fuentes vecinales. El conflicto con este grupo llegó a su punto álgido esta semana.

El martes, la Guardia Civil recibió la primera llamada. "Estaban armando mucha bulla con el coche, estaban haciendo 'trompos' y conduciendo como locos", señalaron, para añadir que "no atropellaron a un niño de milagro". Una patrulla se personó en el lugar para actuar: "Lo cierto es que la Guardia Civil ha acudido siempre rápido y actuado con toda la contundencia que es posible, pero parece que a esto nadie lo puede parar", añadieron.

El día después fue aún peor. El miércoles, siempre según los testigos, los tres entraron en un establecimiento hostelero de la localidad. Empezaron a "intimidar" a clientes y al personal del bar: "Resultan muy amenazantes y ponen el ambiente muy tenso". Según explicaron, estas tres personas pueden portar armas blancas. "No queremos que nuestros nombres aparezcan en ninguna parte porque tememos que nos pueda pasar algo", subrayaron ayer los vecinos consultados por este diario.

La detención

El jueves, la situación se caldeó aún más. El "Jamonero", el otro presunto implicado -que es un vecino conocido en Rioturbio, con un historial "problemático"- y la mujer entraron en otros establecimientos hosteleros "con la misma actitud altiva e intimidatoria". La Guardia Civil tuvo que volver a actuar y, según los mismos testigos, en esta ocasión fueron detenidos. "Los agentes llegaron a subir hasta tres veces en una tarde para intentar calmar los ánimos, para mediar y hacerlos entrar en razón, pero no reinó la paz hasta que se los llevaron", afirmaron.

Antes de llegar a este punto, los representantes vecinales habían intentado calmar los ánimos por su cuenta y dialogar con estas tres personas. "De poco sirve hablar, intentar reconducir una situación, si tenemos en cuenta la actitud que siguen teniendo día tras día. No entran en razón, sentimos que hemos perdido el tiempo", lamentaron los representantes vecinales.

Ya han tomado medidas por su cuenta. Según ha podido saber este diario, algunos hosteleros están mejorando la seguridad de sus locales. "Las fuerzas de seguridad intervienen casi a diario hasta donde sus competencias les permiten, pero poco más pueden hacer hasta que se cometa un delito. No queremos que haya que lamentar un episodio violento", destacaron. Es por eso que quieren idear un protocolo de actuación que cuente con las fuerzas de seguridad y los responsables municipales: "Nuestra intención es acordar una serie de encuentros que nos permitan informar de primera mano de esta situación y buscar posibles soluciones para que los vecinos podamos vivir tranquilos".