Un niño de once años resultó ayer herido tras ser arrollado por un vehículo en las inmediaciones de la estación de autobuses de La Felguera. El menor fue trasladado al Hospital Valle del Nalón para ser sometido a una exploración más profunda aunque, en un primer momento, no parecía presentar lesiones de gravedad, según indicó la Policía Local. No fue el único accidente del día. En el Corredor del Nalón, en el término municipal de Langreo, se produjeron otros dos siniestros que obligaron a regular el tráfico en la vía, principal acceso a la comarca. Uno de ellos se saldó con daños materiales y otro con dos heridos leves.

El atropello tuvo lugar sobre las 14.40 horas. Como consecuencia del suceso, el menor afectado, un niño se once años, sufrió un golpe. Según expuso la Policía Local, su estado no parecía revestir gravedad. Fue trasladado al complejo sanitario comarcal de Riaño para someterse a pruebas más exhaustivas. La conductora del vehículo dio negativo en el test de alcoholemia.

El Corredor del Nalón fue escenario, apenas dos horas antes, de otros dos accidentes, ambos ocurridos en las inmediaciones de Sama. El primero de ellos, según informó la Guardia Civil, se produjo sobre las 12.15 horas en el punto kilométrico 4,800, con dos vehículos implicados y daños materiales. El otro se produjo veinte minutos después, a las 12.35 horas, en el kilómetro 5,200 de la vía. El choque fue por alcance y provocó lesiones de carácter leve a dos personas. En ambos casos hubo que regular la circulación.

El pasado 14 de octubre dos personas resultaron heridas en una accidente en un accidente en el Corredor en el tramo entre Lada y Sama. El suceso causó retenciones en la vía hasta que los dos coches implicados fueron retirados de la vía. El accidente requirió la intervención de dos patrullas de Tráfico y otra de Atestados de la Guardia Civil. Uno de los vehículos se salió de la vía y terminó chocando contra el muro de la carretera. Posteriormente, el segundo turismo impactó contra el primer coche.

El accidente se produjo a una hora con un elevado volumen de tráfico, así que causó retenciones desde un primer momento. El tráfico se reguló pronto, pero no volvió por completo a la normalidad hasta que se retiraron los vehículos de la vía, cerca de una hora después del accidente. Apenas una semana antes hubo otro siniestro a la altura del Mumi. Una mujer resultó herida y los bomberos tuvieron que intervenir para liberar a un perro que se había quedado atrapado en uno de los coches implicados.