La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La sustitución del cable del telesquí Arroyo es otro problema en la demora de Valgrande

La revisión del telesilla del Brañillín no es el único impedimento para que la estación de Pajares pueda abrir sus puertas este viernes, ni siquiera parcialmente. Y es que también hay que sustituir un cable en el telesquí Arroyo, otro de los remontes de la estación, tal y como pudo saber este periódico. Asimismo, aunque el telesquí de El Tubo sí se encuentra disponible, fuentes del sector cuestionan que este remonte tuviese la capacidad para acoger el volumen de esquiadores que se espera estos primeros días de nieve sin que se pueda utilizar el Brañillín. Así que de momento Pajares estará cerrado, aunque la consejera de Cultura, Berta Piñán, se mostró confiada de que la situación esté normalizada para el puente de la Constitución.

El problema radica, como ya se ha dicho en numerosas ocasiones, en la antigüedad de los remontes de la estación y la falta de inversiones durante estos últimos años. De ahí que se haya calificado de "negligente" la gestión de estas instalaciones por parte del Principado. Además, no es el único problema que ha habido en la estación por la mala planificación en los últimos meses. Ahí está la huelga de los trabajadores por el retraso en la entrega de la ropa de trabajo. El pasado viernes tuvo lugar el juicio por este asunto que la plantilla da ya por ganado de antemano y supondrá el pago de indemnizaciones.

El Principado ha anunciado un plan director para Pajares y la Junta aprobó un plan plurianual de inversiones, habrá que esperar para conocer si se lleva a efecto.

Compartir el artículo

stats