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Artistas exiliados a los bares

Pintores y escultores expondrán sus obras en establecimientos hosteleros ante los problemas para hacerlo en el Mieres Centro Cultural

José Antonio García, "Llonguera", con una obra y esculturas para exponer en un establecimiento hostelero. D. M.

Algunos artistas mierenses están molestos con la política de exposiciones que desarrolla actualmente el Ayuntamiento. Este colectivo se siente "desplazado" y "minusvalorado". Se quejan, por ejemplo, de que no tienen acceso a las salas de Mieres Centro Cultural, espacio reabierto el año pasado pero reservado, en principio, para muestras de carácter nacional. Así, la medida que han adoptado resulta llamativa. Los bares y restaurantes de la ciudad se convertirán en "museos".

José Antonio García "Llonguera", autor de muchas de las esculturas que adornan la ciudad, abandera el malestar latente con el Ayuntamiento. "El problema es que en Mieres apenas tenemos sitios para exponer y los que hay se encuentran bastante restringidos". El artista local cita concretamente las instalaciones de Mieres Centro Cultural, reabiertas el año pasado tras llegar el Consistorio a un acuerdo con la Fundación Cajastur, propietaria del inmueble situado en la calle Jerónimo Ibrán. "Parece que los de Mieres no podemos exponer en estas instalaciones, que se reservan para gente de fuera. Los que no somos buenos tenemos que conformarnos con la Casa de Cultura". En este equipamiento municipal tampoco parece sencillo encontrar cabida. Al menos, así lo perciben los artistas.

"En la casa de Cultura te encuentras que casi siempre está ocupada por actividades ajenas al arte, como el coleccionismo, por poner un ejemplo. No es algo que nos moleste, pero esa es la realidad". José Antonio García ha encontrado la manera de dar proyección a su obra sin necesidad de recurrir a espacios públicos. "Al final nos dimos cuenta que lo mejor era buscar un sitio donde fuera la gente". Partiendo de esta idea, la posibilidad de exponer en bares y restaurantes surgió casi sola: "A las salas de exposiciones la gente va poco, pero a los bares va con gusto casi todo el mundo".

La cercana relación en Mieres entre el arte y la hostelería no es algo nuevo. Diversos bares de copas han colaborado a la hora de dar visibilidad al trabajo de pintores y escultores del concejo. La novedad esta vez es el marco de protesta que envuelve la colaboración. "Lo único que pedimos son espacios inclusivos", señala "Llonguera".

El primer "museo-gastronómico" de Mieres será La Consistorial. Hoy este restaurante decorará sus paredes con varias obras de José Antonio García. En concreto, el artista ha seleccionados varios óleos y acuarelas, así como diversas esculturas.

Pese al malestar existente entre algunos artistas locales, la inversión cultural en Mieres ha experimentado un notable aumento en los últimos años tras un periodo de postergación. El Ayuntamiento decidió cerrar a finales de 2011 la Casa Duró. La clausura del principal centro artístico del concejo se abordó tras constatar el gobierno local la imposibilidad de sostenerlo económicamente. Pocos meses después la Fundación Social Cajastur-Liberbank anunció el cese de la actividad de su centro cultural, alegando razones muy similares.

Estas drásticas decisiones dejaron a Mieres sin dos de sus tres grandes salas de exposiciones, provocando la saturación de demanda en las instalaciones de las Casa de Cultura, incluso del Ateneo de Turón. Ahora. El acuerdo alcanzado el año pasado con Liberbank para reabrir, con gestión municipal, tanto el auditorio como la sala de exposiciones del centro cultural de la calle Jerónimo Ibrán ha permitido al consistorio relanzar su oferta artística, muy contenida desde principios de la década. Ahora bien, hay artistas locales que reclaman más visibilidad.

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