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Mieres reabre el parque canino del campus y reclama "civismo"

El gobierno local, que ordena a la Policía reforzar la vigilancia, inicia las consultas legales para instalar cámaras de seguridad

El parque, ayer, todavía cerrado por la mañana. ÁNGEL GONZÁLEZ

El parque canino del entorno del campus de Mieres volvió ayer a abrir sus puertas para los usuarios. Cuatro días después de que el Ayuntamiento se viese obligado a clausurar las instalaciones tras hallarse veneno por segunda vez en menos de dos meses, los usuarios y sus animales ya pueden volver a utilizar el espacio de esparcimiento para perros, el único ubicado dentro del casco urbano. La concejala responsable del área de Desarrollo Urbano Sostenible, Delia Campomanes, avanzó ayer que el gobierno local está haciendo las consultas legales necesarias para instalar cámaras de seguridad en la zona para detectar a los responsables de tales ataques, que se vienen repitiendo de forma regular.

"Es intolerable que en un espacio dedicado a los animales, que precisamente se habilitó para que puedan esparcir sin entorpecer o molestar a aquellos a los que no les gustan los perros, también haya este tipo de situaciones", aseguró la edil. Campomanes pidió a la población "que tenga un poco de civismo, y cesen estos comportamientos aberrantes".

Por lo pronto, el gobierno local ha dado orden a la Policía municipal de que intensifique la vigilancia en la zona del campus como medida preventiva. Además, en octubre, cuando dos perros tuvieron que ingresar al ingerir veneno en el citado parque, se anunció el estudio de la colocación de cámaras de vigilancia. El Ayuntamiento ya ha iniciado las consultas legales para llevarlo a cabo.

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