"La literatura minera se caracteriza por la emoción, el espíritu de rebeldía, la lucha contra la injusticia social y la educación reivindicativa de los trabajadores", manifestó Benigno Delmiro Coto en la conferencia titulada "La presencia de los mineros en la literatura española", un acto organizado por la asociación mierense "Tertulia 17", que tuvo lugar en el Casino de Mieres y que contó con la colaboración del Club LA NUEVA ESPAÑA de las Cuencas.

Delmiro, que estuvo acompañado en la mesa por los miembros de la entidad organizadora Juan José Menéndez y Braulio Antuña, considera que la literatura minera puede ser considerada como una serie literaria de honda raigambre en España y que se remonta a la Edad Media y la preocupación por la pobreza que, posteriormente, aparece en obras del Arcipreste de Hita, Alemán o Calderón, así como en el género picaresco. "Ya se hablaba de la injusticia, de las diferencias entre ricos y pobres y de las penosas condiciones de los trabajadores, destacando el informe que Alemán escribió a Felipe II acerca de la situación de los galeotes en las minas de Almadén", destacó en filólogo, autor del estudio "Literatura y minas en la España de los siglos XIX y XX". Benigno Delmiro Coto se detuvo en la figura de Ciges Aparicio, "precursor de este estilo que mezcla lo periodístico y lo literario, que fue seguido, entre otros, por Alfonso Camín y Domínguez Benavides". Delmiro, catedrático de Lengua y Literatura, hizo mención a la carga ideológica de los textos de 1934, tanto desde la visión burguesa y eclesiástica como desde la posición obrera.

"La gran aportación de la literatura minera, que arranca en Europa con 'Germinal', de Émile Zola, fue la ruptura de la visión estereotipada que se tenía de los mineros, como si fueran fieras", señaló el filólogo, que puso de relieve el mal trato dispensado a la temática minera en comparación con la consideración de la literatura marina. "La mina se describe como un monstruo saturnal que devora a los que entran allí", reseñó Delmiro.

"Las historias mineras no pueden entenderse sin el concepto de solidaridad y el espíritu de insumisión, inconformismo y lucha, algo en lo que la juventud actual debería fijarse dada la actual situación", demandó el ponente, que entiende que la "literatura obrera está teñida de carbón por los cuatro costados hasta el punto de poder ser considerada un subgénero literario pleno de rasgos distintivos".

Autores

El viaje propuesto por Benigno Delmiro a través de la literatura minera llegó hasta Clarín, cuya única pieza teatral, "Teresa", aborda el mundo de la mina y la situación de la mujer, para acabar desembocando en los autores contemporáneos, como Lorenzana, Aitana Castaño, Alberto Vázquez, Zapico, Peyroux, Albino Suárez, Marcelino Iglesias, Xandru Fernández, Fulgencio Argüelles, Rodríguez Medina, Martínez Gallo, García Cellino, Elisabeth Felgueroso y Lauriño.

"Estamos en una Edad de Oro de la producción artística relacionada con la mina", aseguró el conferenciante que lamenta que "la potencia minera actual sólo se traduce en actividad artística".