La alcaldesa de Langreo, Carmen Arbesú, aseguró que la redacción del proyecto para la recuperación de las piscinas de Pénjamo necesita está pendiente "del informe de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico" ya que una de las piscinas está construida sobre un arroyo. "No habrá problema para mover los vasos, ya que hay espacio", indicó la regidora, que añadió que habrá "un proyecto para que la instalación tenga futuro".

Comentó que los técnicos de la Consejería han constatado que los vasos "están en mal estado y que no se podrán salvar". A la asociación sociocultural "El Güesperón", señaló, "se les comunicó que era imposible conservar los vasos". Con este colectivo, que convocó la concentración ante "la ausencia de información" sobre los planes para las instalaciones deportivas, se han mantenido reuniones.

La primera de ellas tuvo lugar a mediados de septiembre en el Ayuntamiento, apuntó la Alcaldesa. Quince días después la directora general de Deportes, Beatriz Álvarez Mesa, visitó la zona y a mediados de octubre representantes del gobierno municipal participaron en una asamblea abierta en Pénjamo. Por eso, Arbesú no entiende que "El Güesperón" hable de falta de información. Llamó la atención también sobre que "comiencen las críticas ahora que se empieza a actuar". El Ayuntamiento logró, comentó, que el Principado se haga cargo del cierre de las instalaciones y de tapiar el edificio de la piscina climatizada. Los trabajos comenzaron días atrás con el vaciado de los vasos.

Las actuaciones "tienen que desarrollarse por orden". Por eso, no se ha incluido inversión en el Presupuesto regional, porque hay que esperar a tener el informe definitivo de Confederación Hidrográfica antes de elaborar el proyecto.