Superviviente dos veces, cofrade con montera rosa. La modelo y periodista Sandra Ibarra, fundadora de la entidad contra el cáncer que lleva su nombre, fue entronizada ayer como Cofrade de Honor de la Cofradía de los Nabos de La Foz de Morcín. Lo hizo "besando el nabu", como manda la tradición, y con uno de los discursos más emotivos que se han pronunciado en la historia del Gran Capítulo -que ayer llegó a su XVI edición-. También "besó el nabu" el cantante Vicente Díaz. Además de la Asociación "El Vallín" y el escritor Eduardo Méndez Riestra.

Dieciséis años de Capítulo y hay algo que no cambia: el humor que llena las calles de La Foz cada fiesta de los Nabos. Las cofradías participantes, cerca de cuarenta, madrugaron ayer para lucir en su tradicional desfile. Hubo una misa cantada por el coro Ars Senatorum y, tras el oficio, la plaza del Cura se llenó de puestos para una degustación. Sidra, jamón, casadielles, vino de Cangas? Todo para empezar a celebrar antes del Gran Capítulo.

La iglesia estaba ya llena al mediodía, esperando por los nuevos cofrades de honor. Se sentaron en primera fila y escucharon atentos al maestro de ceremonias, Rubén Fernández. Su discurso, como en cada edición, honró a los nabos. Dio paso al nombramiento de los cofrades.

El primero fue Amador García, presidente de "El Vallín". "Recibimos este galardón con la mejor ilusión y un orgullo que es casi indescriptible", afirmó. La entidad impulsa el ocio entre los vecinos. Y resulta muy bien: en un pueblo de treinta vecinos, la asociación suma actualmente más de doscientos socios.

Subió al altar, a continuación, el escritor Méndez Riestra. Autor de "Lo comido y lo servido", "Diccionario del Gourmet" y "Cocinar en Asturias", entre otros, no escondió el honor. Además, agradeció a la Cofradía su labor "por recuperar un buen producto tan olvidado".