El Principado asumió ayer el desarrollo de un estudio sobre el aprovechamiento tradicional de los montes públicos del Aramo y del Monsacro pertenecientes al concejo de Morcín. De esta forma, la administración regional abre las puertas para la concesión de propiedad a las tres parroquias -San Sebastián, San Esteban y Piñera- que se han constituido en coordinadora para reclamar conjuntamente que estos terrenos pasen a ser considerados comunales.
El Jurado de Clasificación se reunió ayer en Oviedo presidido por el consejero Alejandro Calvo. Se acordó revisar los antecedentes de cada monte: "Para nosotros esto es un gran paso, ya que nos exime a nosotros de tener que aportar toda la documentación acreditativa necesaria para impulsar el procedimiento", señala Manuel Mallada, portavoz de la coordinadora parroquial de Morcín.
La zona rural de Morcín reclama asumir la gestión directa de más de 800 hectárea de monte. Se trata en concreto de 588 hectáreas pertenecientes al Aramo y otra 220 ubicadas en el Monsacro. La reivindicación tomó fuerza en 2012, aunque su germen se remonta a principios de siglo.
Los vecinos aspiran a que el Jurado de Clasificación asuma que en los montes que reclaman hay aprovechamientos tradicionales, pasados de generación a generación. "Por nuestra parte hemos recopilado información de la compra por parte de los vecinos de parte de estos montes al prelado de Oviedo en el año 1584", apunta Manuel Mallada. Los vecinos destacan que asumir la gestión de estos espacios rurales contribuirá a regenerar la vida de los pueblos. Una de las consecuencia sería que las tasas e impuestos que se paga por ocupación del suelo (antenas de telefonía y torretas eléctricas, por ejemplo) serían recursos que pasarían directamente a manos de las parroquias: "Lo que genera el comunal debe quedar en el comunal y actualmente los ayuntamientos están haciendo un uso indebido de este dinero", remarca Mallada.
