"En las condiciones actuales no son sostenibles. Necesitamos más implicación de las administraciones públicas". Julio Álvarez, gerente de Autobuses de Langreo -la firma que, junto a Alcotan, se ocupa de la explotación de la línea Riaño-Laviana- no oculta su preocupación por el futuro del servicio. "Prestamos el mismo servicio, con mayores frecuencias incluso con la entrada en funcionamiento del exprés, que hace años y el número de viajeros no deja de bajar; todo ello con unos costes que sí van aumentando. O cambian las reglas del juego o la situación no va a ser sostenible", señaló.
El servicio entre Riaño y Laviana, pese a desarrollarse básicamente por ciudad, tiene una catalogación de interurbano al abarcar tres concejos: Langreo, San Martín del Rey Aurelio y Laviana. El precio es el mismo para cualquier recorrido, independientemente de si se cubre todo el trayecto o se realiza un viaje más corto, dentro de un mismo concejo. En otras líneas de la región de autobuses que circulan por ciudad, el servicio cuenta con apoyo público, ya sea a través de empresas participadas por los propios ayuntamientos o mediante ayudas para sufragar parte del coste del billete.
"Necesitamos una mayor implicación de las administraciones públicas, tanto a nivel municipal como regional. Es básico", argumentó Álvarez, que destacó que, pese a la caída de viajeros, no se ha reducido el número de servicios y se "han mejorado las flotas de las dos concesionarias renovando los autobuses".
El máximo responsable de autobuses de Langreo también destacó la "consolidación" del servicio exprés, que "va ganando usuarios".