La implantación de la jornada de 35 horas semanales en el Ayuntamiento de Langreo logró ayer el visto bueno definitivo en el Pleno. Fue con los votos del PSOE y Ciudadanos, las dos formaciones que firmaron el acuerdo con los representantes de los trabajadores para reducir la jornada laboral de la plantilla municipal de 37,5 a 35 horas semanales. Unidas por Llangréu y el PP se opusieron y acusaron al gobierno local y a la formación naranja de "plegarse a las peticiones de los sindicatos sin negociar". Unidas por Llangréu afirmó que la reducción de la jornada supondrá "un deterioro de los servicios" que se ofrecen a los vecinos. "Este salto al vacío puede generar graves problemas de futuro al Ayuntamiento, económicos o en los servicios", aseguró el portavoz de la formación, Jesús Sánchez, que destacó que en Oviedo volvieron a las 35 horas pero renunciaron a las 50 horas de conciliación y los griposos, que en Langreo se mantienen.

Mientras el PP teme que esta medida, que se aplicará el próximo mes, "aboque, en un futuro no muy lejano, a un aumento de los impuestos a los vecinos" para contar con más personal. El ejecutivo municipal defendió el acuerdo. La Alcaldesa, Carmen Arbesú, comentó que no comparte "la visión catastrofista" de Unidas por Llangréu y PP. El concejal de Personal, Javier Castro, destacó que teniendo en cuenta el número de vecinos y la plantilla municipal, en 2012 "cada trabajador daba servicio a 92 ciudadanos y ahora a 87". Y, añadió, "el Ayuntamiento tiene más medios mecánicos que entonces". El portavoz de Ciudadanos, Luis Fernández, comentó que este acuerdo "permite a los trabajadores municipales recuperar sus derechos".

En el Pleno, tomó posesión como edil de Unidas por Llangréu Pablo Álvarez. Además, todos los grupos apoyaron sumarse a la campaña "Asturias, capital mundial de la poesía", impulsada por el director emérito de la Fundación Princesa de Asturias, Graciano García.