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El deterioro del envejecido parque inmobiliario

Mieres busca agilizar los derribos tras sumar más de cien expedientes de ruina

El Ayuntamiento pretende contratar a una empresa para dinamizar las actuaciones, para las que este año tiene reservados 200.000 euros

Casa en ruinas en el barrio de La Villa. D. M.

El Ayuntamiento de Mieres tienen actualmente abiertos más de un centenar de expedientes de edificios en ruina. La edil responsable del área de Urbanismo, Delia Campomanes, explicó ayer a los grupos de la oposición en el Pleno que la intención del gobierno local (IU) es seguir agilizando los procedimientos de derribos dentro del plan municipal impulsado ya en 2018, que prioriza las actuaciones en función del riesgo de derrumbe.

Una de las medidas que tiene en cartera el Ayuntamiento es abordar la contratación de una empresa que asuma las labores de demolición cuando el Ayuntamiento así lo estime necesario. Delia Campomanes apuntó que este sistema dará "más dinamismo" a las actuaciones que realiza el Consistorio.

"Es importante poder evitar, dentro del marco legal, los farragosos procedimientos que actualmente hay que abordar cada vez que se inicia una actuación de derribo subsidiariamente", remarcó Campomanes.

Actualmente el Ayuntamiento de Mieres tiene en marcha dos proyectos de demolición de edificios ruinosos. Se trata del derribo de una casona en Santa Cruz. A continuación se actuará en una vieja edificación del cruce de Santullano. En ambos casos las quejas vecinales se vienen escuchando desde hace mucho tiempo.

Las citadas actuaciones de ejecución sustitutoria se llevan a cabo después de hacer siempre varios requerimientos de forma oficial a las personas propietarias de los inmuebles y edificios, que son las responsables del estado de sus propiedades. Tras los requerimientos oportunos, el Ayuntamiento pide una orden al juez para poder realizar la obra y, posteriormente, cumpliendo todos los requisitos y procedimientos legales, se reclama el dinero invertido en la actuación a los propietarios.

El gobierno local quiere agilizar, al menos en parte, el farragoso procedimiento que debe seguirse cada vez que tiene que contratar una de estas actuaciones. Así, los planes municipales pasan por unificar todos los proyectos y ponerlos en manos de una misma empresa.

El Ayuntamiento de Mieres está tenido desde hace tiempo que redoblar sus esfuerzos para garantizar que el estado ruinoso de mucha casas genere problemas de inseguridad. La concejalía de Desarrollo Urbano Sostenible realizó el año pasado un total de 6 derribos por ejecución sustitutoria con una inversión próxima a los 130.000 euros.

Las citadas actuaciones de ejecución sustitutoria se llevan a cabo después de hacer siempre varios requerimientos de forma oficial a las personas propietarias de los inmuebles y edificios.

Desde hace dos años se vienen abordando continuas actuaciones de calado. A finales de 2018, se derribaron tres inmuebles, en Carrión, La Rebollá, y otro en Vegadotos. Estas intervenciones tuvieron continuidad en 2019 hasta un gasto de 133.000 euros.

El gobierno local duplicó la partida presupuestaria prevista para este tipo de actuaciones, destinando este año para este fin 200.000 euros anuales, "con el objetivo de poder actuar evitando situaciones de riesgo y afrontando los problemas de salubridad que este tipo de edificios e inmuebles pueden causar".

El problema más evidente es que el concejo de Mieres mantiene en pie 1.300 viviendas construidas antes del inicio del pasadosiglo XX. Ahora bien, el auge de la construcción en el municipio se debe localizar principalmente entre 1950 y 1970, periodo en el que se crearon 5.032 viviendas, el 27 por ciento de la bolsa actual, que se sitúa rozando la barrera de los 18.500 inmuebles.

Son muchas las casas, sobre todo del ámbito rural, que se encuentran mal conservadas. El envejecimiento del entramado inmobiliario local conlleva irremediablemente un proceso de decadencia en lo que al estado de muchas viviendas se refiere.

El Ayuntamiento de Mieres recalca que los propietarios de los inmuebles "son responsables de mantenerlos en buen estado". Por ello, se pide que "se tengan en cuenta los avisos previos que se hacen desde la inspección urbanística para evitar llegara una declaración de ruinas".

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