La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

FAUSTINO RODRÍGUEZ ZAPIZO | Decano de los agentes inmobiliarios de la comarca

"El impacto de la crisis fue tremendo, en diez años solo hubo una promoción nueva"

"El alquiler funciona mejor que las ventas, pero, a pesar de haber demanda, hay muy poca oferta y suelen ser pisos de segunda mano"

Faustino Rodríguez Zapico, en su despacho de la inmobiliaria.

Faustino Rodríguez Zapico tiene 76 años. Trabajó 35 en Hunosa y, desde 1975, es propietario de la inmobiliaria Feysa, en La Felguera. "Durante bastante tiempo trabajé a dos relevos y los dos bastante intenso", explica con humor este langreano que ha sido testigo de la evolución del mercado de la vivienda de los últimos cuarenta años. "Tirando del carro, como responsable del negocio, posiblemente sea el agente inmobiliario más veterano de la cuenca y de Asturias. Hice las oposiciones, porque esto antes era imprescindible, en 1975 y desde entonces he estado al frente del negocio", relata. Tras décadas en su tradicional ubicación de la calle Pedro Duro, la agencia se ha trasladado a un local de la calle Santa Eulalia, también en La Felguera.

- ¿Cómo surgió la idea de hacerse agente inmobiliario?

-Fue en un encuentro con dos amigos, echando la partida de dominó en los locales de La Salle. Leyendo el periódico vimos que en Madrid había una academia que se dedicaba a preparar oposiciones. Los tres éramos ingenieros técnicos. Dos de nosotros decidimos presentarnos. Yo tenía 34 años y ya llevaba trabajando en Duro Felguera Minería (integrada después en Hunosa) desde los 18.

-¿Qué le llevó a dar el paso para ser agente inmobiliario en las Cuencas?

-En Langreo solo había una inmobiliaria de un señor que había estado en Argentina, Quico, y vimos que había una oportunidad de negocio. A pesar de que las oposiciones las aprobamos dos, abrimos el negocio en 1975 los tres amigos y empezamos a funcionar bien porque el mundo inmobiliario se desarrolló mucho en esta zona en los años siguientes, antes de la llegada de la crisis. Pusimos a la inmobiliaria el nombre de Feysa para que fuera una composición de La Felguera y Sama. El que trabajaba en Ensidesa se trasladó a Gijón en 1990 y tuvo que dejarlo y el otro amigo, por temas familiares, lo tuvo que dejar también dos años después.

-¿Cómo ha cambiado el mercado inmobiliario en todos estos años?

-El cambio ha sido sustancial. Con el paso de los años el mercado casi fue intervenido, por así decir, por los portales web, con lo cual el sector se expandió de una manera tremenda. Una vivienda se busca ahora de otra manera, no como antes que pasaba por aquí todo hijo de vecino. Y más cuando durante los primeros años solo estábamos funcionando en Langreo Quico y nosotros. Nos publicitábamos en radio sorteando viajes y con anuncios en prensa. Luego ya fue cambiando y empezamos a poner muchas fotos en el escaparate, una idea que me traje de Málaga porque yo veraneaba allí y en este tema estaban mucho más avanzados que nosotros. Hoy en día se funciona sobre todo a nivel de internet y redes sociales

-¿Cómo se encuentra ese mercado inmobiliario en las Cuencas?

-El mercado en las Cuencas está desconocido últimamente. Desde los setenta hasta 2008 y 2009 creció de una manera importante. Se hizo mucha obra nueva y hubo mucho movimiento de vivienda. De aquella se compraba casa con más alegría y también se cambiaba mucho. La llegada de la crisis supuso un impacto tremendo. En Langreo se hizo una sola promoción nueva en los últimos diez años, aquí en La Felguera. El parón es total. A pesar de todos los inconvenientes que tenemos ahora mismo y de la situación en que está el mercado vamos a seguir en la brecha. Tengo la suerte de tener un gran equipo. La persona que menos tiempo lleva conmigo lleva 17 años.

-¿Cuántas casas se vendían antes de la crisis y cuántas ahora?

-Antes podías hacer tres o cuatro operaciones en un mes y ahora igual haces una al mes. De diez años hacia aquí la media de venta del sector bajó un 40 por ciento. Ahora, en la cuenca, muchos clientes tratan de vender la vivienda que tienen por herencia o porque se han jubilado o prejubilado y se han ido a vivir fuera. Hay mucha oferta, sobre todo de vivienda de segunda mano. También los precios han bajado bastante.

-¿Son vendedores a los que no les urge desprenderse de sus propiedades? ¿Infla eso los precios?

-No lo creo. Aquí el mayor problema que tenemos es la demanda. La gente mayor normalmente tiene vivienda y la gente joven, que es la que no la tiene, no tiene trabajo. La oferta tiene que estar orientada fundamentalmente hacia la gente joven, pero al tener que irse fuera a trabajar no compra aquí. Los precios en la zona pueden haber bajado en los últimos años entre un 30 y un 50 por ciento. Hablo de segunda mano porque de obra nueva no hay.

-¿Y el alquiler?

-El alquiler sí funciona un poco mejor. Lo que pasa es que estamos en una zona en la que la gente no suele comprar viviendas como inversión, para alquilar. No es como Oviedo o Gijón, donde hay mucho estudiante y funcionarios trasladados. Aquí si hay demanda de alquiler, de gente que no sabe si el día de mañana tendrá que desplazarse por trabajo, pero hay muy poca oferta. Y las que hay suele ser de segunda mano.

-Se habló de que clientes de fuera, sobre todo madrileños, compraban pisos en barriadas como segunda residencia, ¿se nota esa tendencia?

-De eso algo hicimos nosotros hace algunos años. Cuando se dispararon los precios en las zonas costeras como Gijón o Luanco hubo gente de la Meseta que venía y por poco dinero compraba viviendas aquí en lugar de hacerlo en Gijón, donde les costaba cuatro o cinco veces más. Tomaban esto como base para desplazarse por Asturias.

-¿Cuáles son actualmente los barrios más dinámicos para la venta de vivienda?

-En la Felguera es donde hay más movimiento, especialmente en el entorno de la plaza de abastos, de los colegios y de la zona de La Pomar y Langreo Centro. En otras zonas como Ciaño y Sama es más difícil vender algo.

-Si los precios son competitivos en comparación con otras zonas de Asturias, ¿qué falta para hacer esta zona más atractiva?

-En la zona de Langreo tenemos los precios más baratos de Asturias. Yo leía hace tiempo a un exalcalde que Langreo necesitaba viviendas de más calidad para atraer gente y fijar población, pero eso también tiene un riesgo, que van a salir al mercado a un precio mayor. No podemos olvidar donde estamos ubicados. Las Cuencas, como zona para vivir, no tienen muchos atractivos. No es un espacio abierto como Oviedo, Gijón o Llanera. Lo que haría falta aquí es crear puestos de trabajo. Aquí no se vive mal pero para hacerlo atractivo hace falta empleo. Si tienes el trabajo al lado es el mejor reclamo para quedarte.

Compartir el artículo

stats