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Hunosa debe contar con una térmica de biomasa en la comarca, exige CC OO

El sindicato no descarta financiación mixta con capital privado y serían necesarios centros de acopio, tratamiento y distribución de materia prima

La actual térmica de carbón de La Pereda, en Mieres, propiedad de Hunosa.

La biomasa es para CC OO de Hunosa uno de los pilares sobre los que se debe de establecer el futuro de la empresa pública. Y en ese sentido, el nuevo secretario general de la sección sindical en la hullera, Adrián Miguel Pérez, reclama a la dirección de la compañía que aborde la instalación de una central de biomasa en las cuencas mineras.

"Nuestro sindicato, en búsqueda de un futuro para Hunosa y de una generación de empleo alternativo, logró que se plasmara en el plan de empresa de Hunosa 2019/2027, firmado en el mes de abril del pasado año, su apuesta porque la hullera desarrolle un plan de aprovechamiento de la biomasa forestal con fines energéticos por ser ésta una de las energías verdes con más futuro y que más empleo directo e indirecto genera", explicó Pérez.

En este sentido, agregó que "venimos exigiendo que, según viene recogido en el plan, se estudie la posibilidad de llevar a cabo la instalación de una central térmica de biomasa en la cuenca central asturiana como proyecto singular de diversificación, tal como en su día fue la actual central térmica de La Pereda". Un proyecto que consideró que exigiría una importante inversión, por lo que "podría afrontarse en colaboración con la iniciativa privada".

La sección sindical de CC OO en Hunosa defiende esta iniciativa "como un compromiso de SEPI y Hunosa por llevar a cabo una verdadera transformación de la empresa que le permita mantener su carácter eminentemente energético apostando por la generación eléctrica a través de una materia prima de la que dispone, como es la biomasa forestal, de forma sostenible y respetuosa con el medio ambiente".

Además, también hace mención Adrián Miguel Pérez al aprovechamiento forestal: "En nuestra apuesta porque los montes de la región dispongan de un instrumento de gestión y explotación forestal sostenible que permita poner en valor este recurso y el uso racional de esta biomasa forestal con fines energéticos, demandamos que Hunosa promueva la puesta en marcha de una Estrategia Regional de la Biomasa Forestal, tal como ya existe en otras regiones".

La propuesta no se queda ahí, sino que también reclama que se cree "un clúster que, encabezado por Hunosa, aglutine, entre otros, al Gobierno del Principado de Asturias, la Universidad, las asociaciones madereras, empresarios, propietarios y agentes sociales".

Los planes para biomasa que maneja CC OO especifican también formas de aprovechar los terrenos ociosos en las antiguas instalaciones mineras. "Sería necesario la instalación de centros de acopio, tratamiento, acondicionado y distribución de biomasa forestal que podrían ubicarse en zonas estratégicas como pueden ser valles mineros donde la empresa tiene terrenos en desuso de antiguas instalaciones mineras".

Todo el planteamiento que pone sobre la mesa CC OO de Hunosa va encaminado también a que la empresa pública pueda ser considerada como medio propio de la administración. "Esto permitiría ser la compañía que se dedicase a la instalación, mantenimiento y suministro de combustible de calderas de biomasa en edificios públicos de la región como pueden ser ayuntamientos, colegios, centros de salud, residencias del ERA, instalaciones deportivas, etc. que, en su mayor parte, mantienen calderas tradicionales de combustibles fósiles", apuntó Adrián Miguel Pérez.

El secretario de CC OO en Hunosa agregó que una adecuada gestión y valoración energética de los montes "permitiría beneficios ambientales como reducir la probabilidad de incendios, ayudar a controlar los riesgos de inundaciones y la propagación de plagas, la rehabilitación de tierras degradadas, contribuir al desarrollo sostenible, o reducir las emisiones de efecto invernadero". Además, sería una nueva vía de generación de actividad, ya que a su juicio, también se impulsaría "el desarrollo de nuevas actividades económicas que ayudarían a la necesaria creación de empleo a través de la tala y limpieza de los montes, la reforestación, el tratamiento de la biomasa, el transporte, la comercialización, la instalación y mantenimiento de calderas, etc. lo que contribuiría a la dinamización económica de las cuencas mineras".

Por último, Pérez se refirió al ámbito territorial, y a la necesidad de reactivar unas Cuencas deprimidas. "Con la necesidad tan importante de generación de empleo y de fijación de población que tenemos en las comarcas mineras, especialmente en el medio rural, no podemos seguir obviando las importantes posibilidades y beneficios que tiene el aprovechamiento de un combustible renovable y endógeno como es la biomasa forestal para impulsar el desarrollo socioeconómico de estos territorios hacia una nueva economía que promueva un tejido industrial alternativo al del carbón", finalizó.

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