El "brain-storming" o tormenta de ideas es un concepto que tiene alrededor de un siglo. Fue un publicista norteamericano el que lo inventó y gracias al cual consiguió salvar una empresa. Y precisamente con ese espíritu, el de salvar un proyecto, el Ayuntamiento de Morcín va a poner en marcha una iniciativa similar. El gobierno local convocará en fechas próximas un concurso de ideas para que los vecinos puedan presentar iniciativas para dotar de contenido al edificio que iba a albergar el Museo de los Quesos Asturianos, en la Foz de Morcín, y que lleva desde 2010 completamente abandonado.
El alcalde de Morcín, Mino García (IU), explicó que el Ayuntamiento está esperando que Hunosa apruebe en su próximo Consejo de Administración la venta del edificio del museo de los quesos, que ya tienen pactada por 50.000 euros. "Una vez que sea nuestro, lo prioritario es hacer una valoración de lo que nos costará adecuar la parcela y tratar de financiarlo a través de Inversiones Fiscalmente Sostenibles u otras líneas de actuación externas", prosiguió García.
Y es que la inversión de un millón de euros que costó este edificio en las antiguas tolvas del Pozo Monsacro se ha ido achatarrando con el paso del tiempo. El abandono al que se sometió al inmueble fue total, teniendo que soportar desde actos vandálicos a inundaciones constantes por la falta de mantenimiento y atención. Problemas que Mino García achaca también a la propia obra: "Cuando en 2010 se recepcionó el museo, yo creo que no se debería de haber hecho porque no estaba en las condiciones adecuadas".
Y sobre el contenido, además de hablar con diferentes administraciones, el alcalde quiere que los vecinos tengan implicación para dotar de contenido y actividad al centro. "Creo que la parte civil es muy importante, y que los ciudadanos pueden poner sobre la mesa sus propuestas, que a veces son muy interesantes. La administración a veces está obcecada y hay alguien que te abre los ojos", indicó García. Por ello, la idea es poner en marcha un concurso de ideas de forma que también puedan aportar su punto de vista sobre el destino final del inmueble.
"Nos hemos marcado como reto para esta legislatura el poder sacar adelante y dotar de contenido este inmueble, porque no puede ser que siga cerrado tras tantos años, es un recurso al que tenemos que dar uso de forma sostenible, y es lo que vamos a intentar", señaló Mino García.
Un proyecto, el Museo de los Quesos Asturianos, que nació en 2007 y cuya construcción finalizó en 2010. Desde entonces, todo han sido obstáculos a la hora de dotar de contenido a la infraestructura. Primero, con la llegada del PP al Gobierno y la eliminación de los fondos mineros, se perdió una partida de 800.000 euros para su equipamiento. A partir de ahí, el abandono fue el gran lastre. Pese a que surgieron algunas iniciativas, como convertir el enclave en un centro social, todo fue cayendo en el olvido. Ahora, el Ayuntamiento confía en que esta tormenta, de ideas, traiga por fin la calma.
