Sociedades protectoras de animales de Langreo reclamaron ayer que no se "criminalice" a todos los dueños de perros por los excrementos que aparecen en las calles del concejo y se mostraron partidarios de sancionar con dureza a los propietarios que no recojan las heces de sus mascotas. Un grupo de vecinos del concejo puso en marcha días atrás una campaña con carteles contra los excrementos de perros en los que exigen multas severas y animan a los ciudadanos a que denuncien cuando sean testigos de comportamientos incívicos. El Ayuntamiento, por su parte, planea intensificar las sanciones a los dueños de perros que no retiren las heces de la vía pública.
Los representantes de protectoras de animales del concejo no se oponen a esas sanciones. "Yo tengo tres perros y soy la primera que se indigna cuando ve las calles sucias de cacas", explica Elena Álvarez, del colectivo "Acariciar con el alma", que añade: "Lo que no se puede hacer es criminalizar a todos los que tienen perros y meternos a todos en el mismo saco. En mi opinión es injusto porque son una parte más pequeña los que no retirar los excrementos y al final pagan justos por pecadores".
Álvarez también mostró su apoyo a las sanciones para "los que no cumplan las normas, pero no solo en este caso, sino también con el tema del bozal o de llevar a los perros atados. La normativa debe ser igual para todos y está para cumplirla", señaló.
En una línea similar se manifestó Rebeca Otero, integrante del colectivo Benecane, surgido hace tres años en Langreo. "Hay que cumplir unas normas de convivencia y a mí tampoco me gusta encontrarme esto en la vía pública. La mayor parte de las personas que tienen perros están comprometidas con este tema y se comportan de forma cívica. Yo estoy de acuerdo con que se multe y se persigan estas cosas, pero también otras como son el hecho de tirar colillas o bolsas de plástico. La suciedad que hay en la vía pública no viene motivada solo por una cosa", remarcó Otero.
El gobierno local de Langreo expuso el pasado lunes su intención de actuar con mayor dureza contra este tipo de comportamientos "reforzando la vigilancia y aumentando la imposición de multas", en el caso de que "no se corrija la situación" actual, en la que "existe una problemática real" con los excrementos de perros.
