El Ayuntamiento de Langreo solo impuso dos sanciones el pasado año (una en febrero y otra en mayo) a propietarios de perros por no recoger los excrementos de sus mascotas de la vía pública. El gobierno local, no obstante, tiene previsto comenzar a actuar con más celo -con una mayor vigilancia por parte de la Policía Local y un mayor volumen de multas- "si no se corrige la situación" actual, en la que se ha detectado un incremento de estos comportamientos.
Vecinos de Langreo pusieron en marcha días atrás una campaña con carteles contra las heces de perros en los que exigen multas severas y animan a los ciudadanos a que denuncien. La ordenanza municipal recoge sanciones de entre 60 y 600 euros para estos casos. Langreo tiene censados en la actualidad 3.000 canes, aunque los técnicos municipales estiman que la población real puede ser el doble. La Policía Local ya ha recibido el encargo de preparar una dispositivo especial de vigilancia que "no se implantará a de forma inmediata, pero que estará listo para comenzar a seguirse en el caso de que la situación no mejore y las calles sigan sucias de excrementos", indicaron responsables del gobierno local, que no prevén que se introduzcan cambios en la ordenanza municipal de uso y tenencia de animales de compañía.
Esta normativa ya fue revisada, para endurecerla, en 2011 con multas que pueden alcanzar los 3.000 euros en los casos más graves. Anteriormente, la multa máxima era de 450 euros. La reincidencia también influye en el alcance de las sanciones. En la ordenanza, la sanción mínima oscila entre los 60 y los 600 euros. Entre estas sanciones leves se incluye el hecho de no tener la mascota censada, vender animales a menores, no notificar la muerte de un animal y no recoger los excrementos.
Las faltas graves, con multas que de 601 a 1.500 euros, recogen casos como incumplir lo requisitos sanitarios, el abandono de los animales o tener perros potencialmente peligrosos sin bozal. En los casos de incumplimientos muy graves -maltrato a animales, abandonar perros potencialmente peligrosos o causar la muerte de animales mediante agresiones, entre otros- las sanciones van desde los 1.500 a los 3.000 euros.
A finales del pasado año, el Ayuntamiento puso en marcha una iniciativa de sensibilización que incluyó el reparto de miles de kits con recipientes con forma de hueso para llevar las bolsas con las que retirar los excrementos.
