El negocio tecnológico en la comarca habla francés. De los 1.500 empleos que suman las grandes compañías del sector asentadas en el valle del Nalón, un millar corresponde a la multinacional gala Capgemini. La presencia francesa se verá incrementada cuando se concrete de forma definitiva la venta del 100% de Informática El Corte Inglés (IECISA) a la compañía gala Groupe Français d'Informatique (GFI), una operación en la que se incluyen los dos centros de trabajo, con 150 empleos, que la compañía tiene en Langreo y San Martín. De esta forma, tres de cada cuatro empleos (un 76%) del sector TIC en la comarca serán de empresas de origen francés.
GFI pasará a ser dueña de la planta de software de IECISA en Blimea y del centro de tratamiento de documentos de la firma en La Felguera. El organismo español de la Competencia aprobó a principios de este mes la compra por parte de GFI, una compañía con presencia en 22 países y bajo el dominio del grupo inversor de capital catarí Mannai Corporation. La aprobación por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) supone una primera fase, a la espera de saber si este organismo pone alguna condición a la operación.
La planta de software de San Martín, denominada Espacio Blimea, es una factoría de desarrollo de programas que abrió sus puertas en 2006 y cuenta con 120 empleados. Buena parte de la plantilla está integrada por programadores que se ocupan de desarrollar las aplicaciones, aunque también hay un centro de cálculo y procesamiento de datos, junto con un servicio de atención al cliente. En 2008, dos años después de la apertura de Espacio Blimea, se puso en marcha un centro de servicios documentales, ubicado en una nave de 600 metros de la cuidada tecnológica de Valnalón, en Langreo. El desembolso para abrir esta instalación fue de un millón de euros.
El centro cuenta con trabajadores cualificados que se encargan de digitalizar documentos (por medio de escáner y programas informáticos que "leen" el papel), tratarlos, custodiarlos e integrarlos en los sistemas informáticos de los clientes. El volumen de empleo fluctúa según los proyectos contratados en cada momento, aunque la media es de 30 trabajadores, con picos de hasta 50 empleos. Este centro dispone de protocolos especiales de seguridad para preservar la confidencialidad de los datos que se tratan.
La presencia francesa en el sector tecnológico de la comarca ya contaba con un fuerte arraigo desde 2005, cuando se instaló en La Felguera la compañía Capgemini, la primera gran firma del sector que llegó a las Cuencas. La previsión inicial era alcanzar los 300 empleos y actualmente ya se ha llegado al millar. El crecimiento en los últimos trece años ha sido sostenido gracias al progresivo incremento de la cartera de proyectos gestionados desde las instalaciones de Valnalón. De los 236 empleados contabilizados en el primer bienio de actividad, se pasó a los 400 tras un lustro en marcha. En 2012, en plena crisis, ya se había llegado al medio millar de trabajadores y dos años después la cifra era de 740. Hoy la cifra rebasa el millar.
La mayor parte del personal es de las comarcas mineras, aunque también hay trabajadores de otras partes de Asturias y de otras comunidades autónomas como Cantabria y León. El centro de Capgemini en Langreo orienta su actividad al desarrollo de software, la gestión de sistemas y aplicaciones, y tareas de consultoría.
