El Ministerio para la Transición Ecológica pretende que el reparto de los fondos de transición justa cuenten con el mayor respaldo posible de la ciudadanía. Por eso, formará grupos técnicos, que englobarán a ayuntamientos, sindicatos y agentes sociales y económicos, quienes podrán decidir sobre los proyectos a desarrollar en cada zona. El proceso se inició ya a finales del año pasado en el Suroccidente, pero tendrá su espejo próximamente en las Cuencas.
A finales de noviembre, agentes del Ministerio, representados en Asturias por el Grupo Tragsa, perteneciente a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), citaron a los ayuntamientos del Suroccidente, así como a los sindicatos y asociaciones, entre ellas Ecologistas en Acción, a una reunión para presentarles el proceso de participación pública para la elaboración del convenio de transición justa en los municipios mineros del Suroccidente. De forma previa, les enviaron una documentación sobre el desarrollo del plan, así como un análisis de la situación en la que se encuentra esta zona minera. Un trabajo que, según parece, es el que está desarrollando la Fundación Ciudad de la Energía (Ciuden) en León con las encuestas que envió a esos ayuntamientos a los que les solicitaba datos sobre el paro o la contribución de las empresas mineras que causó indignación en la región vecina.
Tragsa, como señaló en sus comunicaciones con los diferentes agentes, pretende contar con ellos "para la formulación de una estrategia de transición justa para la zona de los municipios mineros del Suroccidente de Asturias y para la identificación de proyectos de inversión concretos que contribuyan a crear empleos alternativos a los inminentes cierres de explotaciones mineras de carbón y de producción de energía eléctrica".
Tras la reunión, se aseguró a los presentes que en enero se formarían los primeros equipos técnicos en el Suroccidente, aunque esa previsión se ha demorado. El cronograma del proceso de participación pública, al menos en un principio, se estimaba entre noviembre y mediados de febrero, con el objetivo de que la firma definitiva de los convenios se realizase entre mayo y septiembre del presente ejercicio. El proceso de participación pública también tendría que llevarse a cabo en las Cuencas. De hecho, Paco Ramos, de Ecologistas en Acción, ofrecerá hoy a las siete de la tarde un taller al respecto en la calle Ramón Bautista Clavería, número 34, bajo, en La Felguera.
En la documentación presentada se hace referencia a la necesidad de un plan de acción urgente para comarcas de carbón y centrales en cierre hasta 2021. Así, hace referencia a las centrales térmicas y explotaciones mineras en proceso de cierre o de cierre decente, de ahí la urgencia de su desarrollo. En este sentido, se establecerán en Asturias tres convenios de transición justa, una para el Suroccidente y dos para las zonas centrales, esto es las Cuencas. Asimismo, se lanzan propuestas como la sustitución de la potencia térmica de carbón por potencia renovable en el mismo punto, las restauración de explotaciones mineras, o la formación e inserción laboral de excedentes de la minería -incluyendo a las subcontratas.
