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Los vecinos, firmes sobre la gestión de los montes de Morcín: "La ley hay que cumplirla"

Los líderes de la propuesta de que los pastos pasen a mano común replican al Alcalde, que ha presentado alegaciones, que "frene este expolio"

Caballos en la vertiente morciniega de Llosorio.

Firmes y ni un paso atrás. Los vecinos que han exigido que los montes públicos de Morcín pasen a mano común no se doblegarán ante las alegaciones presentadas por el gobierno local (IU). "La ley hay que cumplirla", afirman desde Asturias Ganadera, entidad que ha impulsado esta medida para que 1.2000 hectáreas de Morcín estén gestionadas por los vecinos. Uno de los que encabeza la propuesta es Manuel Mallada: "Lo que pretende el Alcalde es mantener un expolio de la dictadura", clamó.

Para entender esta polémica cada vez más encendida en Morcín, hay que retroceder a los años ochenta. Fue entonces cuando el Tribunal Supremo dictó una ley, argumentada sobre el derecho consuetudinario, que obliga a las administraciones a devolver a los vecinos las tierras que gestionaran por tradición -antes de que fueran arrebatadas por el dictadura franquista-. "Y lo que Morcín quiere ahora, a través de un gobierno que se dice de izquierdas, es mantener una orden predemocrática", clamó Jesús García, vicepresidente de Asturias Ganadera.

Replican así a unas alegaciones que ha presentado el alcalde, Mino García -en nombre del Consistorio-, para que esos montes sigan gestionados desde el Ayuntamiento. A pesar de que el Principado sí había comenzado ya la tramitación para ponerlos en mano común. Son 1.200 hectáreas repartidas principalmente entre Llosorio, Monsacro y La Malena.

El máximo dirigente local asegura que solo hay tres vecinos -que representan a dos de las siete parroquias-interesados en que los montes sean gestionados por la población. "Es mentira, hay una asociación. Además, con la ley por delante, bastaría con que lo solicitara solo un vecino", replicó Mallada.

La indignación de los afectados es aún mayor porque, según dicen, "se ha llegado a decir que no estamos preparados para gestionar los montes". "Podríamos poner muchos ejemplos de pésima gestión por parte de las administraciones, como los fondos mineros. Pero es que, precisamente, solo hace falta mirar cómo están los montes ahora que los llevan ellos para entender que lo que dicen es una absoluta falacia", replicó García.

Lo que no dicen, ni unos ni otros, es que Morcín tiene una peculiaridad en sus montes. Fue el primer municipio de Asturias en reclamar a las eléctricas el pago de una tasa por el paso de las instalaciones por terrenos públicos. Y la mayoría de esas instalaciones están en monte común.

¿Para quién sería entonces la recaudación de esa tasa? La ley es clara: para los vecinos, como todos los bienes de los montes que gestionan. Pero hay otra cláusula también innegociable: todas las ganancias que den las tierras públicas se repartirán entre las parroquias para mejorar su calidad de vida.

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