Las medidas del Principado de Asturias para "redistribuir" los centros de atención de pacientes en el área sanitaria del Caudal (nombrada área sanitaria VII)provocan las críticas vecinales. Concretamente en el concejo de Aller, el que suma una mayor extensión. "Tengo ahora un ambulatorio a 500 metros y quieren que me desplace 5.000, a la vez que me piden que no me mueva de casa. Quieren acabar con nosotros", clamó ayer un vecino de Piñeres.

Es una de las localidades afectadas por el cambio de "distribución" del área sanitaria. De hecho, según lo anunciado desde la Consejería de Sanidad del Principado de Asturias, quedarán sin actividad desde hoy los centros sanitarios de Boo, Nembra, Casomera y Piñeres. Pasan a prestar servicio los principales centros de salud del concejo: Moreda, Cabañaquinta y Collanzo, zona baja, media y alta respectivamente.

En la información oficial que han recibido los vecinos, se hace constar que "esta medida es para garantizar una mejor protección a los sanitarios y sanitarias, y a los usuarios y usuarias". "Permite garantizar el cumplimiento de los protocolos aprobados", añade. Además, avanzan que es "transitoria" y que se mantendrá "mientras esté en vigor el estado de alarma". La réplica de los afectados no se ha hecho esperar: "Esto es una medida claramente destinada a ahorrar". Además, destacaron fuentes vecinales, "están haciendo justo lo contrario a lo indicado. Ahora no nos concentramos más de cinco personas. Desde mañana (por hoy), habrá una media de veinticinco personas juntas esperando".