Más de once años después de su inauguración, el polígono industrial de La Moral aún tiene parcelas vacías. En diciembre de 2008, dos años después de iniciarse las obras de urbanización, los solares fueron puestos a la venta por parte del Ayuntamiento de Langreo. A mediados de 2010, todas las parcelas estaban reservadas y se preveía que en breve estaría funcionamiento a pleno rendimiento pero la crisis económica motivó la renuncia de varias empresas, con el que el Consistorio tuvo que volver a sacar a concurso varios de los solares.

Desde entonces han sido varios los intentos desde el Ayuntamiento para atraer a las empresas al polígono, que surgió como el más económico de las áreas empresariales que se pusieron en marcha en aquel momento en el centro de la región, con un precio de 50 euros más IVA por metro cuadrado (58 euros en total).

El último de ellos se puso en marcha en el pasado mandato. El Consistorio puso en marcha entonces un concurso público para vender los diecisiete solares que permanecían vacíos, con una rebaja del 20% en el precio de venta. Dos empresas ya asentadas en el área industrial, el grupo Baldajos y Proquiman, invirtieron para ampliar sus instalaciones en las dos fases. Ésta última adquirió 2.000 metros cuadrados mientras que Recauchutados del Cantábrico se hizo con 9.000 metros cuadrados de la ampliación del polígono.

En la primera fase de La Moral quedan once parcelas sin vender de unos mil metros cada una y en la segunda dos, con alrededor de 10.000 metros cuadrados (21.000 metros cuadrados en total). Para estos terrenos de La Moral II existe interés por parte de Baldajos. La superficie de La Moral II, con una zona ya ocupada, es de 20.000 metros cuadrados de suelo útil (en una parcela que ocupa un total de 46.000 metros cuadrados), en terrenos próximos al pozo Candín de Hunosa. La primera fase del área empresarial langreana tiene, en total, 32.000 metros cuadrados. Su urbanización ascendió a 5,5 millones de euros, procedentes de los fondos mineros de 2002. El coste definitivo de las obras en la última fase ejecutada se situó en 1.097.890 euros. El Ayuntamiento impulsa la conexión de las áreas de La Moral y Valnalón. El proyecto, que se financiará con fondos mineros, tiene un presupuesto de 3,2 millones de euros.