La crisis del coronavirus ha afectado a la línea de transporte entre Mieres y Vegadotos, reduciendo su frecuencia desde ayer. Esta nueva situación ha despertado el malestar de los vecinos de Rioturbio, en núcleo de población más grande en servicio. El problema, es que por ejemplo, los viajeros que llegan sobre las ocho de la mañana a Mieres no pueden regresar hasta la tarde, lo que complica a quienes bajen a la villa para cubrir sus necesidades básicas.

Los recortes hacen que se ofrezcan cuatro servicios de ida y otros tantos de vuelta. A las 8.15, 14.15, 20.15 y 22.15 horas; regresando a las 8.30, 14.30, 20.30, y 22.30 horas. El portavoz de los vecinos de Rioturbio, Ángel Luis Rubio, señaló que "hemos hablado con la empresa, pero nos ha dicho que le han impuesto el horario". Por eso instan al Consorcio de Transportes de Asturias a que recapacita y ponga, "al menos, un autobús a media mañana de regreso". Rubio señaló que, de esta forma, "se facilitará la movilidad para acudir al banco, al médico o a realizar compras que no puedan hacerse en el barrio". En caso distinto, "obligaría a aguantar a los vecinos durante ese tiempo en la calle o a coger un taxi, que cuesta alrededor de ocho euros". El portavoz de los vecinos aseguró que "nosotros somos los primeros que no queremos incumplir las normas, pero creo que no han tenido en cuenta a los vecinos para planificar estos horarios".