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La oportunidad de innovar que perdió Asturias

"Skeleton-ID", el revolucionario proyecto que nació en Mieres y triunfa en Granada

Investigadores del extinto centro de Soft Computing mejoran el exitoso programa de reconstrucción facial que compró México para Ciudad Juárez

Una presentación de "Face2Skulls" a la que acudió la periodista mexicana Diana Washington, que denuncia los crímenes de Ciudad Juárez, con Sergio Damas en primer término.

Una herramienta capaz de reconstruir virtualmente un cuerpo con los restos óseos de un cadáver. Suena a capítulo de CSI, pero no lo es: se trata de "Skeleton-ID", un programa de inteligencia artificial que comercializa Panacea, empresa derivada (spin-off) de la Universidad de Granada.

¿Y por qué ocupa estas líneas un innovador proyecto del sur de España? Porque su germen fue el programa de reconstrucción facial a través de cráneos "Face2Skull": buque insignia del European Centre for Soft Computing de Mieres, clausurado por falta de financiación hace un lustro. Todos los investigadores de aquel programa, salvo uno, han conseguido reunirse en la Universidad de Granada y seguir adelante con este ambicioso proyecto. Lo han mejorado y ahora ocupa ya decenas de artículos y congresos por todo el mundo. "Asturias perdió una oportunidad", afirma Sergio Damas, uno de los principales investigadores.

Para entender bien lo ocurrido hay que retroceder al año 2006. Fue entonces cuando el Centro de Soft Computing abrió sus puertas en Mieres. Al calor de los fondos mineros, en el campus de Barredo. Fuera de las paredes de sus despachos, costaba entender qué hacían los investigadores. Hasta que empezaron a explicarlo: "lógica difusa". Poner números concretos a letras imprecisas: ¿cuántos caramelos son "muchos"? Lo hacen a través de algoritmos y con iniciativas que, poco a poco, explicaron a la población. Pero si hubo un proyecto que brilló, ese fue el que terminó con la patente "Face2Skull".

Al frente de ese proyecto de reconocimiento facial estaba Sergio Damas: "A nivel personal, lo aposté todo por el centro". En 2006, hizo las maletas y se mudó a Asturias desde Granada -donde ejercía de profesor en la Universidad- para liderar el equipo de aquel ambicioso programa. Lo hicieron con transparencia, informando de cada avance. Hasta llegar a la patente y su comercialización.

México adquirió el programa, con el objetivo de innovar en las investigaciones de crímenes de mujeres en Ciudad Juárez. Esa presentación, a la que acudieron autoridades de Chihuahua, tuvo lugar en 2012. Tres años más tarde, el patronato del European Center for Soft Computing -Liberbank, Principado y Universidad de Oviedo- anunció un recorte de fondos tan brutal que los investigadores desocuparon las mesas y se fueron. Adiós a un centro emblemático.

"Fue difícil para todos nosotros, empezando por mí", reconoce Damas. Él es ahora catedrático en la Universidad de Granada. Y su apuesta por el proyecto está más viva que nunca. No solo siguió adelante sino que, junto a un buen equipo, lo han mejorado hasta convertirlo en "Skeleton-ID" -no solo reconstruye rostros, sino todo el cuerpo-. En el equipo están los investigadores de Mieres, salvo una investigadora que decidió quedarse en la región. Además de los miembros de la empresa "Panacea", el proyecto se refuerza con becas -como "Ramón y Cajal" o "Juan de la Cierva"- e investigaciones predoctorales y postdoctorales. En el proyecto sigue involucrado Oscar Cordón (director del European Center for Soft Computing hasta 2011 y también catedrático de la Universidad de Granada). E Inmaculada Alemán, que co-dirige el Laboratorio de Antropología Forense de la misma universidad. "Cuando llegamos a Mieres, esto era el futuro. Ahora es el presente y Asturias está fuera". Palabras de Damas que, más en estos tiempos, animan a reflexionar.

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