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Los avistamientos de osos lo confirman: las Cuencas son clave para su expansión

El Grupo de Investigación del Oso Pardo Cantábrico ya había instalado cámaras durante seis meses en la zona de Redes donde se le detectó hace días

Los avistamientos de osos lo confirman: las Cuencas son clave para su expansión

El avistamiento hace unos días de un oso en Brañagallones, en pleno parque de Redes, confirma la investigación desarrollada por el Grupo de Investigación del Oso Pardo Cantábrico (www.cantabrianbrownbear.org), que pertenece a la Unidad Mixta de Investigación en Biodiversidad (UMIB), con sede en el edificio de investigación del campus de Mieres, sobre la expansión de estos plantígrados en la Cordillera. Las Cuencas zona clave para esta ampliación del territorio osero.

El grupo de investigación ya había instalado varias cámaras trampa en distintos sectores del parque de Redes y en Ponga para detectar la llegada del oso a estas áreas. Para individuar las áreas más propicias en las que poner estas cámaras, el grupo se basó en un trabajo científico que realizó años atrás con el Servicio del Medio Natural de la Consejería de Desarrollo Rural, Agroganadería y Pesca del Principado de Asturias, que financió el estudio. Este estudio fue también publicado en la revista "PLoS ONE" en el año 2019 y estuvo firmado por Alejandra Zarzo-Arias, Vincenzo Penteriani, María del Mar Delgado, Paloma Peón Torre, Ricardo García González, María Cruz Mateo Sánchez, Pablo Vázquez García y Fredrik Dalerum. El artículo se denominó "Identifying potential areas of expansion for the endangered brown bear (Ursus arctos) population in the Cantabrian Mountains", que en castellano sería "Identificación de áreas potenciales de expansión para la población de osos pardos (Ursus arctos) en peligro de extinción en las montañas del Cantábrico".

A lo largo de más de seis meses, desde el verano del año pasado, el grupo colocó cámaras trampa en la zona de Brañagallones, donde hace unos días fue señalada la presencia de un oso. Sin embargo, estas cámaras no registraron ejemplares. Eso, como destaca el investigador Vincenzo Penteriani, "no quiere decir que no haya osos, sino que no tuvimos la suerte de que pasaran por delante de nuestras cámaras". Eso sí, asegura que "se podría suponer que se trate realmente de una expansión muy reciente". Una expansión que, como destacó "ha ocurrido en una de las zonas individuadas por nuestro trabajo predictivo realizado gracias al Principado de Asturias y publicado en 'PLoS ONE'". Penteriani asegura que, en el grupo, "consideramos que este trabajo realizado por el Principado es muy importante a la hora de predecir la ocurrencia de futuros daños de osos, ya que está acertando sobre las áreas donde están apareciendo osos de forma reciente".

Por esto es muy importante las labores de prevención de daños, lo que posibilitará la convivencia entre osos y humanos. Algo que destacó la investigadora Alejandra Zarzo, también miembro del grupo de investigación, durante la presentación de su tesis doctoral hace pocos días. De este modo, habría que recuperar las protecciones para colmenas y pastores eléctricos, que en algunos casos se habían abandonado.

Asimismo, el que se hayan avistado osos en el parque de Redes también puede ser un revulsivo para el turismo. En este sentido, Penteriani defendió la regulación de puntos de observación de osos que, según parece, "de momento no parecen afectar al comportamiento habitual de los osos, porque la mayoría de estos puntos están lo suficientemente lejos de los animales, eso sí, habría que analizar su colocación en función de las características de cada lugar".

El avistamiento en Brañagallones fue realizado por Miguel Fernández, vecino de Bezanes, que se encontró un ejemplar en plena ruta. "Vio el coche, echó a correr y huyó monte abajo", aseguró este vecino, que logró captar este encuentro con su teléfono móvil como prueba de lo ocurrido.

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