La reactivación de los planes de empleo y la recuperación por parte de la plantilla municipal de los complementos retirados en 2012 ha provocado que el gasto en personal haya sufrido un importante repunte en el Ayuntamiento de Mieres. El sostenimiento de los servicios conllevó el año pasado un desembolso de 14.978.170 euros, con un incremento del 15 por ciento con respecto a 2018. Con todo, el gasto en este apartado sigue bastante alejado de las cifras alcanzadas en 2010 y 2011. Y es que tras la firma del polémico convenio laboral de 2009, aún vigente, el pago de nóminas se elevó hasta los 16,5 millones de euros justo cuando los ingresos municipales estaban en caída libre debido a los efecto de la crisis económica financiera, que derivó en una crisis fiscal.
El gasto en personal comenzó a dispararse en el Ayuntamiento de Mieres con el cambio de siglo. En 1998 no excedía de los 9,7 millones. Apenas un lustro más tarde, el presupuesto ya era de 12,3 millones (2005).
El presupuesto municipal del año pasado ascendió a 37.898.276. Se trata de un gasto muy similar al de las cuentas de 2009, las anteriores que fueron aprobadas, todavía con el PSOE en el gobierno local, y que superaron los 38 millones de euros. Una de las diferencias más evidentes entre ambos documentos se enmarca en el capítulo de personal. El presupuesto que IU tramitó el año pasado en solitario dejó el gasto en sueldos en casi 15 millones. Pese a la notable subida con respecto a 2018, la cuantía se mantienen 1,5 millones por debajo de la de 2010.
El nuevo escenario laboral viene marcado por varios factores. El Ayuntamiento de Mieres retomó en 2018 los planes de empleo. Era la primera vez en tres años que el Consistorio accedía a este programa, después de que surgieran problemas judiciales por las bases del plan regional. Algo más de medio millón de euros recibieron, en global, los 31 trabajadores del plan de empleo 2015 que reclamaron por vía judicial su reincorporación al Ayuntamiento. De esta forma se evitó que estos desempleados pasen a engrosar la plantilla laboral del consistorio, pero el coste económico fue alto.
Además, los trabajadores del Ayuntamiento de Mieres han vuelto a percibir por mandato judicial los complementos que les fueron retirados en 2012 con la aplicación del polémico plan de ajuste que diseñó y ejecutó el gobierno local para poder sumarse al plan estatal de proveedores.
