Es una de las estaciones más importantes de Europa y conquista cada año a cientos de miles de esquiadores. Pero eso no es óbice para que el camino de la modernización y el cambio tenga que recorrerse inexcusablemente. La estación andaluza de Sierra Nevada se plantea un vuelco en su gestión. El gobierno andaluz presentó un plan estratégico para la estación granadina, que se desarrollaría hasta el año 2030, y en el que la sostenibilidad ambiental y la económica se conjugarán para poner las bases del futuro inmediato del complejo invernal andaluz.
Este plan estratégico "Sierra Nevada 2020-30" propondrá actuaciones en el área de nieve artificial, un sistema clave en los inviernos con escasas precipitaciones. La altitud de la estación granadina facilita alcanzar la temperatura necesaria para que los cañones puedan funcionar con más regularidad que en el Norte. El proyecto contempla la ampliación de la innovación a las pistas más bajas y zonas clave de la estación. La renovación de los viejos cañones, emprendida esta temporada, será otro de los ejes fundamentales, ya que los nuevos dispositivos de última generación producen más nieve en menos tiempo y con menos gasto energético.
En pistas y remontes, el documento planteará actuaciones tendentes a aprovechar y optimizar el dominio esquiable, a renovar medios mecánicos antiguos por otros nuevos de mayor capacidad, así como al diseño de nuevos remontes que permitan una mejor distribución de los usuarios.
Para ello, el gobierno andaluz señaló que la gestión del complejo deberá de ser eficiente, con el objetivo de generar los fondos necesarios para hacer frente a las inversiones que deberán impulsar a la estación como motor de riqueza y empleo para Granada y Andalucía. Por su parte, los gestores explicaron que ya esta temporada 2020 se han invertido más de 9 millones de euros en la instalación de 33 cañones nuevos de última generación, nuevos recorridos, pantallas informativas, gamificación en pistas, webs y mejoras en alquileres, plazas y restaurantes, entre otras.
