Un hombre se enfrenta a una pena de dos años de cárcel acusado de realizar tocamientos a una mujer con la que coincidió en una de las habitaciones del Hospital Valle del Nalón, en el distrito langreano de Riaño. Al menos esta es la petición que realizará el ministerio fiscal, que considera que lo ocurrido es un delito de abuso sexual, durante la vista oral que está fijada para hoy, a las nueve y media de la mañana, en el Juzgado de lo penal de Langreo.

Los hechos tuvieron lugar el 12 de abril de 2019 en el citado hospital. El acusado -nacido en el año 1966- se encontraba ayudando a su pareja en el cuidado de la madre de ésta, que estaba ingresada. En la misma habitación también se encontraba asistiendo a otra persona ingresada la mujer que denunció los tocamientos. "Sobre las dos de la madrugada, con las luces apagadas, el acusado se acercó a la butaca donde dormía la mujer, que estaba tapada con una manta, y le realizó tocamientos por encima de la ropa", sostiene el ministerio fiscal. La mujer, siempre según el escrito de Fiscalía, "le preguntó qué estaba haciendo, quitándole la mano con fuerza, entonces el acusado abandonó la habitación".

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de abuso sexual del artículo 181.1 del Código Penal. Por ello, solicita que se condene al acusado a dos años de prisión, además de la inhabilitación para el ejercicio de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y el abono de las costas procesales. También solicita la prohibición de acercarse a la mujer, domicilio y lugar de trabajo, a menos de 200 metros, así como de comunicarse con ella por cualquier medio durante tres años. Asimismo, y en concepto de responsabilidad civil, el ministerio fiscal solicita que el acusado abone una indemnización a la mujer de 2.000 euros.

Es la segunda vez este año que se trata en tribunales un hecho relacionado con el Hospital Valle del Nalón. El primero tuvo lugar en el mes de abril, cuando la Audiencia Nacional de Oviedo absolvió a una fisioterapeuta del centro que había sido acusada de espiar el historial médico de una compañera. En este caso, la Fiscalía pedía para ella tres años y medio de cárcel, mientras que la acusación particular solicitaba dos años y medio. La mujer había denunciado en su día a dos compañeras por divulgar sus datos médicos, de forma que fueron condenadas a dos años y medio de cárcel. Los hechos por los que la fisioterapeuta fue absuelta fueron en julio de 2015 cuando la mujer, según la Fiscalía, que estaba destinada en la sala de electroterapia del complejo sanitario de Riaño, entró en el historial de su compañera. Ella alegó en el juicio celebrado en Oviedo que, si llegó a los datos, fue de forma "accidental".