La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Más de un año de espera por la licencia de un ascensor: "La escalera es casi un infierno"

Una comunidad de Pola de Lena denuncia la demora en los trámites para instalar el elevador, imprescindible para un vecino con discapacidad

El edificio, cerca del centro de la Pola.

A simple vista, son poco más de diez escalones empinados. Para José Ramón Cotera García, con una lesión medular que dificulta su movilidad -tiene un 68 por ciento de discapacidad reconocida- son "poco menos que un infierno". Son las escaleras que separan el portal de su casa, en el primero de un bloque de pisos de la Pola. La comunidad lleva algo más de un año esperando por la licencia para la instalación de un ascensor: "Estamos a punto de perder la subvención para las obras", claman, al borde de la desesperación, los vecinos.

Son ellos contra el Ayuntamiento, en una lucha que comenzó hace ya algo más de un año. "El pasado mes de julio presentamos ya la solicitud de la licencia", explica Raquel Cienfuegos, una de las vecinas que actúa como portavoz. Y empezaron los problemas. Tras levantar el bloque de pisos, se acometió una construcción que entonces cumplía con la distancia establecida en la legislación. Pero no con la actual. "Tuvimos que pedir un permiso al propietario, que se dilató porque tenía que entregarse por escrito en la Administración". También solicitaron una subvención de algo más de 50.000 euros al Principado -la mitad del coste de la obra-, que llegó concedida.

En plena tramitación, estalló la crisis sanitaria del coronavirus. "Todo quedó paralizado. Pero, cuando la Administración empezó a funcionar telemáticamente volvimos a preguntar por la licencia". Más enredos, más vueltas de hoja: "Cuando terminamos de arreglar algo con un departamento, surge un nuevo problema en otro área", señaló Cienfuegos.

Así, hasta ahora. La última noticia del gobierno local (IU) la tuvieron ayer: "La alcaldesa (Gema Álvarez) llamó al presidente de la comunidad para decirle que los trámites técnicos ya están listos". Les dicen que la licencia estará lista "con la mayor brevedad posible", pero sin un plazo determinado.

Y los plazos son muy importantes. Primero, porque han tenido que solicitar una prórroga al Principado para la subvención: "Es una prórroga de seis meses. No nos han contestado, aunque creemos que estará aprobada". Y segundo, porque el plazo de ejecución de la obra ya va muy ajustado: "Si conseguimos ese aplazamiento del Principado, tendríamos algo más de siete meses para acometer la actuación, que tiene un plazo de ejecución de siete meses y diez días".

"La situación es muy complicada, aún más con la crisis sanitaria actual". Temen que se decrete un nuevo confinamiento, medida que atrasaría aun más todos los trámites y la obra. Lo que reclaman es simple: "Una licencia de obra para que podamos poner el ascensor y todos los vecinos podamos disfrutar de él. Sobre todo nuestro vecino del primero". José Ramón Cotera lleva ya meses viviendo en otra casa que tiene en la zona rural. Porque esas escaleras ya eran un imposible.

Compartir el artículo

stats