Hace justo un año que la llama de las Cuencas se apagó un poco más. Tras meses de un intenso conflicto laboral, con una movilización social que volvió a quemar en las calles, la planta de Vesuvius cerró sus puertas. Atrás quedaron 126 empleados, para los que la compañía y las administraciones prometieron un paquete de medidas sociales. Tiritas para un golpe muy duro.
Entre esas medidas, estaba la creación de una mesa técnica –formada por sindicatos, administraciones y representantes sindicales– para la reindustrialización de la planta y sus terrenos. Objetivo: encontrar proyectos que llenaran ese espacio y que dieran prioridad a los trabajadores sin alternativa. La iniciativa iba bien, a la planta le salieron hasta diez pretendientes. Pero la crisis sanitaria del covid-19 ha frenado las negociaciones. “Lo principal es mantener el interés de potenciales compradores”, afirmaron ayer representantes de esa mesa técnica.
La mecha de Vesuvius, multinacional anglosajona dedicada a la fabricación de productos refractarios, se encendió en septiembre de 2019. La compañía anunció el cierre. Y parecía una decisión firme e incuestionable. Las calles reaccionaron: marchas, cierres de carreteras, huelgas y encierros. Una sociedad volcada, pero nada sirvió.
“No hablaremos de las negociaciones hasta que haya algo cerrado”, afirman desde CC OO
Finalmente, la plantilla tuvo que asumir el cierre pero con condiciones: prejubilaciones, recolocaciones y el citado plan de reindustrialización para los terrenos de Langreo.
Un plan del que se habla poco, pero que sigue en marcha. El secretario general de Comisiones Obreras (CC OO) de Industria, Damián Manzano, explicó ayer que “no nos gusta hablar de este tema, esperamos a que haya algo cerrado y no especular”.
Sí es cierto que, durante una visita de la FADE a las instalaciones, el Principado anunció que había diez “pretendientes” para la planta. Ofertas que podrían seguir sobre la mesa, pero que aún no se han materializado: “Lo importante ahora es seguir trabajando, no queremos que los potenciales compradores pierdan el interés”, afirmó el líder de Comisiones Obreras.
Y en ello siguen. Aunque las últimas reuniones se celebraron de forma telemática. La mesa técnica confía en el valor y el interés que despiertan los terrenos y las antiguas instalaciones de Vesuvius, que están ubicadas en el polígono industrial de Riaño I. Los 32.000 metros cuadrados de superficie que, este mes, soplan su primera vela vacíos.
