El concejal hasta ahora del PP, Juan Antonio del Peño, va a pasar en los próximos días al grupo de los no adscritos. Así lo confirmó el propio edil, que mantiene una tensa relación con la dirección del partido en Aller, personificada en Juan Sutil. Los populares alleranos denunciaron a Del Peño ante el Comité de Derechos y Garantías a nivel regional después de que el díscolo edil votase a favor de los presupuestos presentados por el gobierno del PSOE, cuando la orden del grupo era la de abstenerse. Sin embargo, el citado comité quizá no deba actuar, ya que el propio Del Peño tiene previsto darse esta misma mañana de baja como afiliado de los populares.

El edil explicó que “en el Pleno que tuvimos el lunes, se presentó la reorganización del grupo municipal del PP, en la que me excluían de todas las comisiones, impidiéndome realizar la labor para la que fui elegido, que es representar y defender los intereses de los vecinos”. Por ese motivo, y en la misma sesión plenaria, el propio Del Peño manifestó su intención de dejar el grupo municipal popular, para pasar a ocupar una posición como concejal no adscrito.

Esta postura aún no es firme, ya que el edil tendrá que tramitarla para que sea aprobada por el Pleno municipal en una nueva sesión, aunque la situación no tardará en oficializarse, poniendo fin así a una etapa de dos décadas como concejal del PP en Aller.

Juan Antonio del Peño se ha mostrado desde el inicio del mandato distante con la dirección local del partido, especialmente del presidente, Juan Sutil, con el que mantiene una fría relación. Le acusa de ser una persona “que no da la cara” y de haberle poco menos que marginado dentro del grupo municipal. Incluso apunta a que en las últimas elecciones nacionales, Sutil dio orden de cambiar la cerradura de la sede de la Junta Local de Aller para evitar que entrara en el local que tienen en Moreda.

Su relación con la líder del PP regional, María Teresa Mallada, también se ha deteriorado. De aquella amistad surgida hace más de veinte años, de compartir Corporación y de ser uno de los defensores más aguerridos de la dirigente popular cuando llegó a la presidencia de Hunosa, no queda prácticamente nada. El edil se siente traicionado y ve a la que fuera su “amiga”, como una persona “que solo vela por sus intereses personales, por alimentar su ego político, sin importarle los amigos o los cadáveres políticos que deje por el camino”.

Y por ello, Del Peño, afiliado a Comisiones Obreras, no solo dejará el grupo municipal, sino también el PP. Hoy mismo tiene previsto ir a Oviedo a tramitar su baja de la formación. “Les voy a ahorrar trabajo y me voy yo antes de que me vayan a echar”, apuntaba ayer. “Es una pena que quien me reclutó para el partido sea hoy la que me quiere echar, pero ha demostrado que solo le interesa el poder”, afirmaba el edil sobre Mallada.

Del Peño, que fue cabeza de lista por el PP a la alcaldía de Aller, pasará ahora a ser un edil sin filiación política. “Para lo que me eligieron los vecinos fue para defender sus intereses, para llevar al Pleno sus peticiones, y para trabajar desde el Ayuntamiento por hacer su vida mejor, y eso es lo que voy a seguir haciendo, y lo que en el PP no me dejaban hacer”, apuntó el concejal.