La estación de Valgrande-Pajares abrió esta mañana la temporada de esquí en Asturias en medio de una enorme nevada. El equipamiento optó por limitar la actividad a la zona baja de las instalaciones. Unas 300 personas, la mayoría de los apartamentos de la propia estación, disfrutaron de una tranquila y fría mañana: “Hay bastante niebla, pero la nieve está perfecta”, aseguran los usuarios.

"La nieve está perfecta , aunque hay bastante niebla"

La dirección del equipamiento lenense ha velado por el cumplimiento de las medidas de seguridad e higiene que marcan los protocolos específicos elaborados por la dirección general de Deporte y ratificados por las autoridades sanitarias. “Al haber poca gente no ha habido aglomeraciones y, además, el personal ha estado atento permanentemente para que se cumplas las normativas. Todo perfecto”, apuntan esta mañana los esquiadores consultados por este diario.

La circulación por el puerto Pajares ha permanecido toda la mañana con cadenas. Esta circunstancia ha provocado que muy pocos esquiadores se hayan desplazado desde el centro de la región a la estación, por lo tanto, el aforo máximo de 1.200 personas ha estado lejos de alcanzarse.

Fuentees de Invierno, pese a tener todo listo para la actividad deportiva, deberá sperar debido a los aludes que han afectado a la carretera de San Isidro, el más grave de ellos, con consecuencias mortales, con un operario de mantenimiento ya encontrado sin vida y un segundo trabajador desaparecido desde el viernes al mediodía