La farmacéutica Bayer seguirá apostando por la planta de producción que tiene en Lada con nuevos proyectos. Así lo aseguró ayer Bernardo Kanahuati, CEO (director ejecutivo) de Bayer en España y Portugal, durante el acto de presentación de las principales cifras de actividad en España, que tuvo lugar en la localidad valenciana de Quart de Poblet. Allí la multinacional cuenta con una planta especializada en la elaboración de productos para la protección de los cultivos que cumple ya medio siglo.
Kanahuati aseguró que “de forma continua, siempre estamos explorando cómo podemos utilizar la capacidad que tenemos en nuestra planta de Asturias de la mejor manera”. En este sentido, aseguró que “tenemos proyectos en la última etapa de finalización y nos gustará compartir detalles más específicos en breve”. También dio cuenta, como publicó LA NUEVA ESPAÑA, de que la Comisión de Asuntos Medioambientales había autorizado a la multinacional para producir nifedipino (usado para el alivio de la angina de pecho, así como para la hipertensión arterial y para otros usos), que se comenzará a producir en Lada a finales de año. El CEO de Bayer manifestó que “tenemos los planes del nifedipino en La Felguera y pronto lo compartiremos de manera oficial, aunque todavía faltan algunos detalles”.
El nuevo principio activo que se producirá se unirá a los cinco actuales que ya se producen en Lada: el ácido acetilsalicílico; el ácido salicílico; el butafosfán, un estimulante del metabolismo de uso veterinario; el imidacloprid, principio activo de un antiparasitario para mascotas; y el clotrimazol. El ácido acetilsalicílico se produce en las instalaciones de Lada desde 1942, cuando las empresas industriales Duro Felguera y Explosivos Riotinto y varios bancos constituyeron la Sociedad Productos Químicos Sintéticos, que pasaría a llamarse posteriormente Productos Sintéticos (Proquisa). Después sería adquirida por Bayer en 1969. En la actualidad, desde Asturias sale el 100 por ciento del ácido acetilsalicílico con el que se elabora toda la producción mundial de la Aspirina.
Y sobre la Aspirina también habló ayer el representante de la farmacéutica. Y más concretamente de su relación con el coronavirus. Recientemente se dio a conocer un estudio –cuyas conclusiones todavía deben ser ratificadas– dirigido por investigadores de la facultad de Medicina de la Universidad de Maryland (EE UU) que esgrimía que las personas hospitalizadas por coronavirus que tomaban diariamente una dosis baja de aspirina para protegerse contra las enfermedades cardiovasculares tenían un riesgo significativamente menor de complicaciones y muerte.
Al respecto, Kanahuati expresó la cautela con la que la compañía se toma este avance: “Ahora, con la pandemia hay un foco en el efecto que puede tener la Aspirina en esta enfermedad. Nosotros, desde Bayer, solo confirmamos que la Aspirina es un producto que recomendamos en las indicaciones aprobadas. Cualquier evidencia médica que surja y que se apruebe, será evaluada para ver si se puede integrar dentro de nuestras especificaciones de producto”. De hecho, explicó que el ácido acetilsalicílico “es una molécula que se estudia desde hace más de 100 años y la evidencia médica al respecto cada vez es más rica. Incluso hay estudios que se hacen con áreas oncológicas”. Por tanto, y hasta que no haya nuevas indicaciones, el CEO de Bayer recomendó que “siempre se consulte al médico. El covid es un padecimiento en el que no nos podemos automedicar, así que consultar con el médico es lo más importante. Él seguro tendrá la mejor recomendación para tratar al paciente”.
No se habló en el encuentro de nuevas inversiones concretas para la planta de Lada. La firma ha acometido notables desembolsos en los últimos años para ampliar y modernizar sus instalaciones.
La firma mantuvo su volumen de ventas el pasado año y destinó 65 millones a inversiones
Bayer presentó ayer sus principales cifras de actividad en España destacando que, a pesar de haber sido un año “especialmente retador”, la compañía ha conseguido mantener el tipo. Así, el año pasado cerraron con unas ventas netas de 667 millones de euros, con una caída del 0,3% respecto a 2019. A eso se le suma la inversión de 65,5 millones de euros, que se incrementó en un 9% con respecto el año anterior y que supone “un nuevo récord en su cifra de inversión anual en España”. Del total invertido, 27,9 millones de euros se han destinado a la mejora de las infraestructuras de la compañía en todo el territorio, con la expansión y mejora de sus centros en base a criterios de sostenibilidad y eficiencia. Los otros 37,6 millones se han destinado a reforzar las actividades de Investigación y Desarrollo. “En un año lleno de retos como el actual, la labor que desarrolla nuestra organización en el país es crucial para hacer llegar nuestra innovación en salud y alimentación a todo el mundo”, aseguró Bernardo Kanahuati, CEO de Bayer en España y Portugal, añadiendo que “reforzamos nuestra posición en el presente y nos preparamos para afrontar un futuro en el que queremos tener una contribución esencial en sectores tan relevantes como la salud y la alimentación, y en el que nos proyectamos para poder seguir aportando a la economía y al empleo del país, de manera sostenible”. Sobre las ventas, el principal contribuidor ha sido el área de Pharmaceuticals (medicamentos por prescripción) que ha registrado unas ventas de 332 millones de euros, una disminución de 2,4% respecto el año anterior, debido en parte a la crisis sanitaria.
