Como en Fuenteovejuna, en Caborana fueron todos a una. Y lograron su objetivo. Los vecinos de esta localidad allerana consiguieron el jueves que el Principado les vaya a proporcionar una solución a los problemas que les vienen acarreando unas obras en su carretera. Tras varios días de quejas infructuosas, ayer decidieron coger el toro por los cuernos, y paralizar los trabajos. En dos horas, ya habían logrado solución.

A las ocho de la mañana se plantaron en la obra y comunicaron a los operarios que no les iban a dejar trabajar. “En poco tiempo apareció un responsable de la empresa, que me imagino comunicase con el Principado, y en menos de dos horas había solución”, apunta Óscar Rodríguez, presidente de la Junta de Iniciativas de Caborana. Y esa solución, parcial, conllevará barrer toda la zona para quitar piedras y polvo y aplicar una lechada de alquitrán. “Es suficiente por ahora”, señaló. Una vez finalicen los trabajos, se les asfaltará la carretera. “Está claro que si no nos unimos, no nos hubieran hecho caso”, señala el responsable vecinal.