Luna Reyes, en representación de los voluntarios de Cruz Roja que ayudaron en la crisis migratoria de Ceuta, ha sido galardonada con el Premio de la Fundación Emilio Barbón. Este galardón, recuerdan desde la entidad, reconoce “ a todas aquellas personas físicas o jurídicas, entidades u organismos cuyo trabajo sea el compromiso ciudadano con la sociedad, en la estela de la trayectoria personal y social del recordado Emilio Barbón”.
El fallo se ha hecho público, como es tradición, en el salón de actos del Ayuntamiento de Laviana. En torno a las dos de la tarde.
El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha formado parte del jurado. Y ha sido el encargado de leer el fallo: ""Tras la entrada en Ceuta de ocho mil inmigrantes marroquíes y subsaharianos, una de las organizaciones que, junto a la Guardia Civil y el Ejército, participó para socorrer a los que llegaban en malas condiciones, fue la Cruz Roja. Movilizó a todos sus voluntarios en Ceuta, que acabaron desbordados y necesitaron el poyo de más voluntarios llegados de Andalucía. Los trabajadores humanitarios fueron testigo de una crisis migratoria sin precedentes en las costas españolas", leyó Barbón.
Y, de entre todas las imágenes para la historia, quedará en el recuerdo el abrazo de Luna a un joven senegalés. Le consolaba después de que el hombre perdiera a algunos amigos que le acompañaban. Muchos reconocieron la labor de Luna, con el movimiento "Gracias Luna", aunque también hubo movimientos en contra de la ayuda a los migrantes. Tal fue el odio, que la joven -de 26 años- tuvo que cerrar su cuenta de Twitter.
Ahora, desde la Fundación Emilio Barbón, le dan las gracias en forma de galardón: "Emilio Barbón estaría muy orgulloso de que Luna, y todos los voluntarios que trabajaron con ella, se lleven este premio", concluyó Barbón.
