El sindicato UGT en el Caudal salió ayer en defensa de los trabajadores de Rioglass Solar, que se enfrentan al despido de 52 de sus compañeros, tal y como ha propuesto la empresa en los últimos días. “Defender los puestos de trabajo y de las fábricas de nuestro territorio, es un objetivo irrenunciable”, destacaron ayer en el sindicato, más cuando el sector en el que se enmarca Rioglass Solar cuenta con un futuro prometedor. Por eso, en UGT manifestaron ayer que “no entendemos por qué Atlántica Yard ha aumentado su posición accionarial hasta la mayoría en el consejo de administración de Rioglass Solar, única y exclusivamente para despedir personal”.
En cuanto a las buenas previsiones del sector, el sindicato alude al informe de la consultora Price Waterhouse Cooper sobre la industria termosolar en España encargado por la asociación Protermo Solar, “que destaca la creación constante de empleo en España en termosolar, así como un futuro prometedor con la instalación de 5 gigavatios hasta 2030, lo que supondrá triplicar la potencia instalada hasta la fecha en España, país líder en el mundo en instalación de termosolar”. En cuanto a la firma que tiene el control de Rioglass Solar, Atlántica Sustainable Infraestructure, “tiene previsto invertir 1.000 millones de euros en renovables en EE UU y en España, fundamentalmente entre 2020 y 2022”. De ahí que no entiendan la actual postura de la compañía de despedir a sus empleados.
“Resulta sorprendente que la propia asociación Protermo Solar mencione expresamente a Asturias, como una de las regiones con mayor futuro dentro del campo de la energía termosolar”, destacan en UGT y que, sin embargo, “la multinacional Atlántica, con sede en Londres y cotizando en la bolsa de Nueva York, no aporte, tanto para la empresa y por ende, para las comarcas mineras, un plan industrial viable, que garantice la continuidad de la totalidad del empleo, de calidad y estable”. Un plan industrial que, para el sindicato, también debería convertir a las plantas de Mieres y Lena “en un polo de investigación de energías renovables, al ser Rioglass Solar un líder mundial en la fabricación de equipos termosolares, así como tener el conocimiento y la experiencia en la instalación de sus equipos por todo el mundo”.
Pero las críticas no van solo hacia la empresa, también hacia el Ministerio para la Transición Ecológica y su titular, la ministra Teresa Ribera, por su “falta de voluntad política, por no defender una industria preeminentemente renovable, líder en su sector, permitiendo estas prácticas depredadoras de una multinacional, que funciona como un ave de rapiña”.
La propuesta que Rioglass Solar ha puesto sobre la mesa es un ERE de extinción para 52 de sus trabajadores, aunque ofreció la recolocación de treinta de ellos en otras plantas de la compañía. Ante este panorama, la empresa solo garantiza el empleo para 26 de sus 91 trabajadores, la mayoría de administración. Y es que queda la incertidumbre laboral en 16 empleados que ahora no entrarían en el ERE porque son necesarios para un proyecto que durará entre tres o cuatro meses. En el sindicato estiman que correrán la misma suerte que sus compañeros.
