“Solo faltan los últimos retoques”. El primer proyecto financiado con cargo a los fondos mineros 2013-2018 está a punto de terminar incluso antes de que empiecen a salir a concurso las obras de los restantes. La reforma integral del barrio San José de Lada, cuyos trabajos solo se retrasaron por el “parón” obligatorio de las primeras semanas del confinamiento, es ya una realidad en la mayor parte de los bloques que se han beneficiado de la obra. Tan solo quedan trabajos, “remates” en varios de los portales. En total, son 258 las viviendas públicas modernizadas y que se han tomado como un “ejemplo de regeneración urbana”, de cómo aprovechar un edificio antiguo y dotarlo de los medios de ahorro energético más modernos. La obra tuvo un coste de 6,5 millones de euros, el 75% financiado por el Estado y el 25%, por el Principado.
La reforma en el barrio San José se inició en noviembre de 2019. Tras conocer el proyecto, el Observatorio Europeo de la Vivienda lo tomó como un modelo a seguir en la modernización de bloques de pisos antiguos, construidos en este caso en el año 1955. Ahora serán viviendas “energéticamente punteras”, con escaso gasto y huella energética. La obra fue adjudicada en dos lotes, uno de ellos a Construcciones y Reparaciones Amado S. A. (por 3,12 millones) y otra a la unión temporal de empresas (UTE) formada por Iguar-Ceteco (3,36 millones).
La finalidad del proyecto es la de dotar a los ocho bloques, 258 pisos, todos ellos de titularidad pública, de mejores condiciones de accesibilidad y eficiencia. Entre las obras ejecutadas se encuentra la renovación de las cubiertas o la instalación de un sistema de aislamiento térmico que acaba con las humedades por condensación en las fachadas. También incluye la renovación de las carpinterías exteriores (ventanas, balcones, barandillas) que dota a las viviendas de un sistema de ventilación “de doble flujo”, que garantiza la calidad del aire interior. Además, se mejoró la accesibilidad de los pisos de planta baja, con rampas y pasarelas.
El Gobierno regional destacó, al iniciarse los trabajos, que esta es una “apuesta innovadora que mejorará la eficiencia del sistema de calefacción y que ha logrado convertirse en un ejemplo de política de vivienda en Europa”. En estas viviendas, el Principado acometió mejoras años atrás por un importe cercano a los 700.000 euros. Se renovó el saneamiento y se repararon doce pisos desocupados.
Los proyectos que impulsan el Principado y los ayuntamientos con financiación de los fondos mineros del Plan del Carbón 2013-2018 son 60. De ellas 42 iniciativas serán gestionadas por los propios municipios y las 18 restantes impulsadas por la administración autonómica. En diciembre del pasado año el Principado y el Instituto para la Transición Justa firmaron los convenios de 55 de los proyectos. La inversión en todas las actuaciones programadas es de 93,1 millones de euros.
