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Plantean que Hunosa se transforme en una eléctrica estatal para abaratar la luz

El SOMA propone que la hullera asuma las concesiones hidráulicas que caducan y ayude así a reducir los precios del mercado energético

La presa de Tanes, soltando agua: entre este embalse y el de Rioseco hay una central hidráulica. | Fernando Rodríguez

El precio de la electricidad está en máximos históricos, y batiendo récords un día si y otro también. Unos excesos del mercado que pagan ciudadanos y empresas, y ante los que apenas se están poniendo soluciones. Y para controlar esas elevadas facturas, el SOMA-FITAG-UGT ha recuperado una iniciativa que lleva meses defendiendo y que afectaría de forma singular a las Comarcas Mineras. Desde la central reclaman al Gobierno estatal que convierta a Hunosa, la hullera asturiana, en una empresa pública energética, de forma que mataría varios pájaros de un tiro: aseguraría y consolidaría su futuro, y serviría “como freno de los excesos del mercado que grava injustamente la economía de las familias, a la vez que fortalecería la competencia del mercando español evitando la concentración en unos pocos grupos empresariales”.

La central minera indicó que “no hay tiempo que perder, debemos buscar nuestra soberanía energética y reducir la dependencia del exterior, al igual que lo hacen los países de nuestro entorno mediante una empresa pública energética”. Hace referencia el sindicato como ejemplo a tres estados europeos, como son los casos de Francia, con su compañía Électricité de France, la empresa Energías de Portugal o el Ente nazionale per l’energia Elettrica (Enel) en Italia. Precisamente esta última compañía fue la que adquirió la entonces pública Endesa, dejando al Estado español sin una empresa de este tipo. “No debemos tener ningún complejo de utilizar una herramienta que ya está creada, que tiene un tremendo potencial a desarrollar, y que no es otra que la empresa Hunosa”, apuntan desde el SOMA.

La central minera entiende que la hullera pública está dando pasos hacia una transición energética y ecológica justa, algo que se refrenda dentro del acuerdo del Plan de Empresa 2019-2027 negociado entre los sindicatos y la dirección de la compañía estatal. La empresa presidida por Gregorio Rabanal “ha presentado un plan de transformación de la Central Térmica de La Pereda hacia una central de biomasa y cierto porcentaje adicional de combustible sólido recuperado (CSR)”. “Esta transformación tendrá un impacto socioeconómico significativo en Asturias con el mantenimiento del empleo existente, y con la generación de nuevos empleos asociados principalmente a la gestión y explotación del biopolio forestal que se generará, y que permitirá acoplar los intereses y necesidades que pueda tener Hunosa con otras empresas, centros de investigación y propietarios forestales”.

La central minera entiende que “en este escenario, es urgente que la hullera, la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi, accionista mayoritario de la compañía minera), y el Gobierno de España, den prioridad y agilicen el cumplimiento de este Acuerdo del Plan de Empresa de Hunosa, para sí poder colocar a la empresa publica a la vanguardia de una Transición Energética Justa, sin perder de vista que no debe quedar nadie atrás, ni trabajadores, ni territorios”.

Libres de cargas

Una de las medidas que el SOMA, tal y como avanzó LA NUEVA ESPAÑA el pasado verano, pone sobre la mesa, es la de recuperar las concesiones para las centrales hidráulicas. “Hay que plantearse recuperar gratuitamente y libre de cargas, todas las obras construidas en dominio público hidráulico para la explotación energética, y que podría gestionar, sin ningún tipo de problema, la empresa pública Hunosa, orientando así su aprovechamiento al interés y beneficio general, cuando estamos hablando, en algunos casos, de centrales que están produciendo electricidad entre 10 y 12 euros el megavatio/hora”.

El SOMA indica que “es necesario un control público de la explotación de las centrales hidroeléctricas cuyas concesiones caducaron, e irán caducando en los próximos años, tras años de explotación y beneficio de la iniciativa privada. Sería, además, un sano ejercicio de coherencia, responsabilidad y transparencia”. Precisamente, antes de 2030 expirarían las concesiones de hasta un 20% del total de las existentes. La potencia instalada en centrales hidráulicas supone un 20 por ciento del total nacional.

“Tampoco podemos dejar pasar mas tiempo sin poner encima de la mesa cuáles serán las reglas del juego futuras para el Almacenamiento Energético hidráulico o Termosolar, donde hay empresas punteras tecnológicamente trabajando en España, y planes que ya han sido catalogados Proyecto de Interés Común por la Unión Europea”, agregaron desde la central minera.

Pacto

El sindicato asturiano liderado por José Luis Alperi lleva años insistiendo en la necesidad de firmar un Pacto de Estado por la Energía, que sea “moderno, riguroso, flexible, de medio y largo plazo”. Un acuerdo entre las formaciones políticas “con seguridad jurídica, que dote de estabilidad al sector, de tal suerte que contribuya a ganar en productividad, competitividad (tanto industrial, como social), viabilidad empresarial, y, por tanto, generar empleo estable y de calidad”. “Siempre hemos defendido la necesidad de debatir, sin apriorismos, sobre la fiscalidad de la energía, incluso sobre la posibilidad de aplicarle un IVA superreducido como bien de primera necesidad, cuestiones de las que hoy seguimos firmemente convencidos”, agregaron.

Por último, el sindicato exige al Gobierno y a Sepi que conviertan a Hunosa “en una empresa pública energética, que ayude a contener los excesos del mercado, y con perspectiva de futuro. No hace falta crear ni inventar nada, ya tenemos la herramienta, solo hace falta voluntad política de querer utilizarla”.

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