El palacio del Conde de Toreno, en pleno centro de Oviedo, fue testigo ayer de la firma de los primeros convenios específicos con los ayuntamientos asturianos para el desarrollo de una docena de actuaciones del Plan del Carbón 2013-2018. Unos proyectos que suman inversiones por valor de 13,29 millones de euros de los 93 que se aportarán para 60 iniciativas (42 de ellas desarrolladas por los consistorios y el resto por el Principado). El consejero de Industria, Enrique Fernández, presidió este encuentro al que acudieron los responsables municipales de Mieres, Lena, San Martín del Rey Aurelio, Gijón, Siero y Tineo. Fernández aseguró que “después de muchas gestiones y no pocos años, por fin hemos podido firmar con los ayuntamientos estos convenios específicos que contribuirán a la reactivación de las comarcas mineras y a la necesaria revitalización postpandemia que precisamos para salir de esta situación crítica en la parte económica y social”.
Del total de actuaciones firmadas ayer, Mieres se llevó siete convenios por valor de casi cuatro millones de euros. Aquí se enmarcan la ampliación de la red de calor con agua de mina, diversas actuaciones de mejora de la eficiencia energética, la tercera fase de la Ciudad del Tenis y el acondicionamiento de las instalaciones deportivas en La Riquela. En Gijón se pondrá en marcha un vivero de empresas de actividades turísticas, de deporte activo y centro de desarrollo tecnológico en La Camocha por 1,5 millones de euros. En Lena se abordará la urbanización del área industrial de Villallana, con 5 millones, mientras que en Siero, concretamente en Lieres, se desarrollará un vivero empresarial con 750.000 euros. En San Martín se empezará a urbanizar el polígono industrial Venturo I, con 601.000 euros y, en Tineo, se construirá un edificio para naves nido en el polígono industrial de La Curiscada con una inversión de 1,44 millones de euros.
El consejero destacó que, con esta firma, “el Gobierno cumple su compromiso de agilizar estos fondos que habían sufrido numerosos retrasos e incumplimientos, que felizmente ahora han sido recuperados”. Ahora sí podrán licitarse los proyectos y comenzar cuanto antes, sobre todo porque lo que no ha cambiado es la fecha límite para la conclusión de los trabajos, que está fijada para septiembre de 2023. Salirse de esta línea temporal podría, al menos de momento, acarrear la pérdida de algunas de las cantidades comprometidas.
Una financiación de la que los ayuntamientos no podrán un solo euro, sino que corren a cargo del Instituto para la Transición Justa (75%) y el Principado de Asturias (25%). Asimismo, y como apuntó el consejero, aquellos consistorios que así lo soliciten podrán obtener un adelanto del dinero por anualidad. Es decir, que si una obra está presupuestada para este año y el siguiente, el ayuntamiento podrá solicitar la parte correspondiente a este año y, el ejercicio siguiente, el resto del montante. A estos doce convenios se suman otros dos que ya han sido aprobados por las consejerías de Derechos Sociales y Bienestar y Presidencia en Mieres y Morcín, respectivamente, con un coste total de casi 1,3 millones de euros.
Y aunque ayer se procedió a la firma de los convenios con los ayuntamientos, el Principado sí ha conseguido iniciar algunos de los proyectos que iba a desarrollar en solitario en las comarcas mineras. Entre estas actuaciones se encuentra el proyecto de la mejora de la eficiencia energética en la barriada del Pilar, en Lada; y diversas obras de saneamiento. En total, Asturias llevará a cabo unas sesenta actuaciones enmarcadas en el plan 2013-2018 por valor de 94 millones.
Los polígonos de Villallana y Venturo, entre los principales proyectos
Los convenios específicos firmados ayer por el Principado y los ayuntamientos dan luz verde a algunas actuaciones destacadas y que llevaban tiempo a la espera. Entre ellas se encuentra la urbanización del polígono de Villallana, en Lena; o el desarrollo del polígono industrial Venturo I en San Martín del Rey Aurelio. La urbanización del polígono de Villallana, que contará con cinco millones de euros, lleva pendiente desde hace más de quince años, cuando empezaron a funcionar dos empresas en el área, sin que el suelo estuviera preparado. Se trata de Asturiana de Laminados (Asla) y Rioglass Solar. Las empresas no sólo se asentaron en un suelo no urbanizado y sin enlaces, sino que los terrenos ni siquiera eran de propiedad municipal. Tras obtener todos los permisos y autorizaciones, solo está pendiente de licitarse. El proyecto de Venturo I tiene un presupuesto de 601.00 euros y define tres zonas diferenciadas de actuación que en conjunto ocupan una superficie de 49.620 metros cuadrados. Una zona colindante a la AS-338, otra próxima al río Silvestre y una última del pozo Venturo. La financiación que ahora se consigna por convenio permitirá acometer una primera fase, que se corresponde con el área anexa a la carretera AS-338, en una misma cota de altura y con buena accesibilidad, en una extensión de 22.000 metros cuadrados. Esta obra está pendiente de lograr las resoluciones favorables de la Consejería de Medio Ambiente y de la dirección general de Infraestructuras Viarias que se encuentran en fase de tramitación,. También precisa la autorización de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico. Posteriormente, explican fuentes municipales, el proyecto de urbanización será aprobado por resolución de alcaldía y expuesto a información pública.
