El Principado va a adaptar el proyecto para arreglar el Corredor del Nalón entre Campo de Caso y Bezanes, además de los dos tramos que quedan por ejecutar de la carretera de Arniciu, que unen Bueres con Infiesto. Así lo aseguró el alcalde de Caso, Miguel Fernández, que coincide con el consejero de Medio Rural y Cohesión Territorial, Alejandro Calvo, en la necesidad de plantear actuaciones de menor calado a las reformas integrales planteadas en las dos vías. El objetivo es arreglar las carreteras con mayor rapidez, algo imprescindible para los vecinos dado su mal estado, sin grandes proyectos, y menor coste económico y ambiental.
“Las condiciones económicas actuales no permiten ejecutar estas obras tal y como están previstas y las carreteras no aguantan más”, afirmó el regidor casín. El presupuesto para abordar la obra en el primer tramo de la vía que une Campo de Caso con Tarna, entre la capital del concejo y Bezanes, “es de 17 millones de euros” para un trayecto de siete kilómetros. En el caso de Bueres-La Marea, de 12,4 kilómetros, la inversión en el proyecto ascendería a 10,2 millones y el tramo que conecta La Marea con Infiesto tendría 9 millones de euros de coste, según los datos facilitados por el Principado en el mandato pasado. Ahora se quieren arreglar, pero a menos coste y también menor plazo.
Pronto finalizarán las obras del primero de los tramos de la vía, entre Campo de Caso y Bueres. El Principado ya ha iniciado la tramitación ambiental del proyecto de arreglo del segundo. El Consejero confirmó días atrás que los dos tramos que restan por abordar serán adaptados para reducir su coste “ya que no serían ejecutables a corto plazo en la coyuntura actual”, dijo.
El alcalde de Caso considera que es necesario que la actuación en estas carreteras no se dilate y para ello hay que adecuar los proyectos. “Igual tenemos que actuar en varias curvas pero no realizar grandes desmontes”, señaló. “Entre Bueres y la Collada ya no hay asfalto”, añadió Fernández.