Diseminados por el prau en “grupos burbuja”, refugiándose del sol bajo los pórticos de la ermita o sentados en sillas con la obligada separación para cumplir los protocolos anticovid. Decenas de personas se acercaron ayer hasta El Carbayu para celebrar el día grande de Langreo y rendir honores a la patrona. Otros muchos –unos quinientos– lo hicieron desde sus casas, a través de la retransmisión del acto institucional y de la misa posterior realizada vía “streaming” a través de internet. Fue una celebración presencial y virtual al mismo tiempo en la que participaron desde la distancia muchos emigrantes langreanos y residentes de geriátricos de la zona, según remarcaron los organizadores.
Para todos ellos tuvo un recuerdo especial en su intervención el presidente de la Sociedad de Festejos y Cultura “Nuestra Señora de El Carbayu”, Julio González. “Tenemos constancia de que la Asociación Langreanos en el Mundo ha avisado a sus cientos de asociados y también nos consta que hay residencias de la tercera edad de concejo que han reunido a sus usuarios para que nos puedan seguir desde sus centros. Desde aquí, un gran abrazo para todos”, esgrimió González, que agradeció la colaboración de Hunosa en la retransmisión de la fiesta, una novedad para la edición de este año.
González protagonizó el acto institucional junto a la regidora langreana, Carmen Arbesú. Antes hubo voladores, gaita y tambor, y un concierto para conmemorar los 75 años del Coro Santiaguín. Los actos principales (la intervención de las autoridades y la misa posterior, al mediodía) se celebraron en una carpa exterior, con la imagen de la Virgen de El Carbayu presidiendo la explanada frente al santuario, donde se colocaron las sillas. Un sol de justicia disipó los temores de lluvia y animó a los asistentes, en su mayoría parapetados tras la mascarilla.
El balance anual y los proyectos de futuro marcaron buena parte del discurso del presidente de la sociedad. “Esta entidad no existe solo para este día. Estamos todo el año aquí, orgullosos de representar la fiesta mayor de Langreo”, afirmó González, para referirse después a la plantación de castaños en las inmediaciones de la localidad. “Es el proyecto más ambicioso de la Sociedad en la última década y de que, como presidente, más orgulloso me siento. Nació en enero de 2020 y poco más de año y medio después, 211 castaños ya están plantados y apadrinados”. Y añadió: “Este proyecto nos permite aumentar nuestro patrimonio y generar riqueza forestal en la zona. Seguimos creyendo en él y para ello hemos adquirido recientemente más terreno para seguir con la plantación de nuevos castaños”.
La alcaldesa de Langreo mostró, por su parte, su confianza en ir dejando atrás la pandemia “sin bajar la guardia”. Abriendo un nuevo horizonte sin “lanzar las campanas al vuelo” pero también sin “quedarse instalado en el pesimismo”. “Las cosas mejoran y aquí estamos, recuperando El Carbayu después de la pausa de 2020, que nadie deseaba pero que era la opción más sensata; hoy podemos recuperar la costumbre de reunirnos aquí, frente a la ermita, y celebrar los que nos une”.
Sobre la repercusión de la pandemia, Arbesú destacó la respuesta dada por el Ayuntamiento, tanto en el cuidado de personas vulnerables en un primer momento como el apoyo a los autónomos afectados por los cierres. “Se dio un vuelco al presupuesto de 2020 para reorientarlo hacia la atención a quienes tenían problemas de liquidez y se pusieron más de 800.000 euros a disposición de las pymes y de las familias que se habían visto enviadas al paro o a un ERTE. En la medida de sus posibilidades y recursos, el Ayuntamiento estuvo y está ahí. Y me gusta resaltar ese mensaje en un día como hoy, que trata de celebrar cosas juntos, de dar sentido a la vecindad y a la vida en comunidad. Langreo solo puede estar bien en su conjunto si cada uno de los langreanos y langreanas lo están”.
La festividad prosiguió tras el acto institucional con la tradicional misa, que se celebró fuera del templo, cantada por el Coro “Santiaguín” y oficiada por Luis Fernández, párroco de Sama y Ciaño. El sacerdote también tuvo palabras para la pandemia y su impacto sanitario y económico. “La Virgen de El Carbayu contempla nuestra tragedia, dándonos consuelo y ánimos. Y nos invita a la esperanza” ante “un virus que ha paralizado la vida”.
Tras la celebración litúrgica, el Coro “Santiaguín” y la Banda de Música de Langreo interpretaron los himnos de Langreo y de la Virgen de El Carbayu. También intervino la cantante Mina Longo, dando por finalizados los actos centrales de día. Muchos de los asistentes aprovecharon ese momento para hacerse fotografías con la imagen de la patrona y junto a la escultura del árbol, inaugurada recientemente, que repasa los nombres de los galardonados con las distinción de Langreanos de Honor.
Este año no hubo procesión, para evitar aglomeraciones, pero muchos asistentes se quedaron para asistir al traslado de la imagen de la patrona al interior del templo, a cargo de un grupo de fieles, escoltados por los miembros de Protección Civil. La fiesta se trasladó entonces a la carpa instalada junto a la ermita. La música volvió con Mina Longo para la sesión vermú y, posteriormente, con “Sones Vieyos”, que amenizó la comida campestre. Para la tarde estaban programadas las actuaciones de Vicente Díaz y de “FL Covers”, antes de proceder al fin de fiesta, con el sonido de los voladores, a las diez de la noche.
Y el mismo mensaje en todas las despedidas. La esperanza de que el año próximo se pueda celebrar una fiesta sin restricciones, señal de que la pandemia ya ha quedado atrás.
