El programa “Veranu Xacobéu en Payares” se ha saldado con un notable aumento de la participación, según el balance de la Consejería de Cultura, Política Llingüística y Turismo. En concreto, el remonte El Brañillín ha sumado 8.282 utilizaciones, un 60 por ciento más que la campaña estival pasada. En total, siempre según los datos facilitados ayer por el Principado, 1.900 personas han participado en las diferentes actividades llevadas a cabo en la estación.
La campaña, “destinada a reactivar la estación con una oferta deportiva y lúdica que complemente su atractivo turístico”, ha incluido una amplia programación con actividades tales como rutas de senderismo, bike-park, paintball, adiestramiento canino o un torneo de baloncesto “3x3”. También se han celebrado los campeonatos de Asturias de Descenso y de Trial, y una exhibición de Yamaha España. La programación estival en la instalación lenense incluyó igualmente la jornada “Pajares en verde” o el concierto del grupo “Luz de gas”.
“Con este programa, que llega a la segunda edición, la Consejería corrobora su apuesta por la desestacionalización de Valgrande-Pajares y la diversificación de la oferta de actividades que potencien el valor del equipamiento”, señalan desde al Administración autonómica. También muestran su apoyo “a la reactivación de la estación como motor económico de la zona de Lena”.
La infraestructura de la estación aportó al “Veranu Xacobéu” dos relevantes atractivos: la apertura del telesilla de El Brañillín, para poder acceder a la parte alta de la estación, y la de la cafetería Cuitu Nigru.
El Principado está haciendo un importante esfuerzo para dotar a Valgrande, al igual que a Fuentes de Invierno, de una atractiva oferta de actividad estival. El objetivo es atraer visitante durante todo el año como fuente de recursos económicos para la comarca. Esta planificación coincide además con el proyecto de modernización que Pajares afrontará en los próximos tres años.
Pajares es una de las estaciones de esquí más emblemáticas del país. No en vano, supera con creces el medio siglo de vida. En concreto, 66 años contemplan a Valgrande-Pajares, que en el próximo trienio sufrirá una renovación integral con dos objetivos primordiales: convertirse en el motor económico del valle del Huerna y lograr garantizar una desestacionalización del equipamiento. E
El plan director diseñado desde el Principado de Asturias, y que ha logrado 10 millones de euros de los fondos mineros para su desarrollo, incluye numerosas actuaciones, pero dos de ellas son las troncales: la sustitución de los remontes y la mejora del sistema de innivación artificial.
La estación cuenta con una clientela más o menos fija cada temporada de esquí y esta renovación de remontes, mejora de la nieve artificial y otros proyectos anexos como la mejora de pistas o la de los propios sistemas de suministro, también podría atraer a más clientes a lo que será una estación moderna. Pero más allá de eso, la clave está en la desestacionalización de las instalaciones.
