El Montepío de la Minería Asturiana pidió en el mes de junio a sus afiliados un “empujón” para relanzar la campaña de verano y poder iniciar así el camino de la recuperación económica tras el duro golpe que ha supuesto la pandemia para la entidad. El llamamiento ha tenido respuesta y el 92 por ciento de los mutualistas habituales en el verano del Balneario de Ledesma han reservado plaza en el equipamiento.
“Nuestros mutualistas han entendido la dimensión del problema y la necesidad de romper y vencer miedos, de dar un paso al frente. Nuestras actividades salud y sol lo han notado”, destaca el presidente de la mutualidad, Juan José González Pulgar, muy satisfecho por la respuesta de los asociados.
Tras luchar durante años para conseguir la estabilidad económica, el Montepío fue duramente golpeado por la pandemia. Así, la entidad perdió durante el 2020 casi 1,5 millones de euros, de los que 1,16 millones (el 77%) corresponden precisamente al balneario de Ledesma, unas instalaciones fuertemente afectadas por los cierres derivados del covid. Los residenciales de Roquetas de Mar, en Almería, y Los Alcázares, en Murcia, perdían en el mismo ejercicio 37.000 y 163.000 euros respectivamente. El Balneario de Ledesma es caso aparte. Sumó en 2020 unas pérdidas por valor de 1,16 millones de euros. Durante todo el año apenas pudo abrir unas semanas, lo que conllevó, unido a las restricciones en el turismo y la movilidad, que el equipamiento pasara de conseguir unos ingresos de 5,86 millones de euros durante el 2019, a solamente 534.000 euros el pasado año. Como ejemplo, desde la mutualidad explicaron que solo los costes de personal del balneario supusieron un desembolso total de 884.000 euros. Con todo, se consiguió superar un proceso de concurso de acreedores.
Imserso
El Montepío no ha disfrazado en ningún momento la gravedad de la situación que atraviesa, pero sin dejar de llamar a un optimismo fundamentado en los nuevos programas. La temporada veraniega ha cumplido en buena parte con las expectativas, y el llamamiento a los mutualistas fue satisfactorio. Ahora, a la mutualidad tiene que abordar otros retos de calado. Por ejemplo, la reactivación del programa estatal de termalismo (dependiente del Imserso) permitiría recuperar una fuente de ingresos vital para la supervivencia del Balneario de Ledesma. Y es que sólo en Asturias está previsto cubrir 1.667 plazas, con 60.000 a nivel nacional.
En el caso del termalismo se trata de un servicio que facilita la asistencia a los balnearios a las personas mayores. Entre la cobertura que se ofrece está el alojamiento y manutención en régimen de pensión completa y en habitaciones dobles de uso compartido, tratamientos de balneario y la realización de actividades de animación, entre otras propuestas.
