La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Vesuvius seguirá apagada: no fructifica el interés por reabrir la planta de Langreo

El Principado afirma que se continúan buscando inversores para la nave, cerrada hace dos años | La factoría de Burgos sí ha recuperado la actividad

La planta de Vesuvius ubicada en Riaño. | L. M. D.

El interés de “varias empresas” por la planta de Vesuvius en Langreo, que cumple dos años cerrada, no se ha materializado. El consejero de Industria, Empleo y Promoción Económica, Enrique Fernández, aseguró que en los últimos meses algunas compañías pusieron sus ojos en las instalaciones de Riaño pero, apuntó, “finalmente no llegó a concretarse ningún proyecto alternativo”. Mientras, la factoría del grupo británico en la localidad burgalesa de Miranda de Ebro lleva casi cuatro meses en funcionamiento en esta nueva etapa después de que Vesuvius Ibérica y Tropical Millenium –empresa con sede en la provincia de Málaga y que se dedica a la producción, exportación y distribución de frutas tropicales– suscribiesen un acuerdo.

En respuesta a una pregunta trasladada por el portavoz parlamentario de Podemos, Daniel Ripa, Enrique Fernández señala que “se continúa con las tareas de prospección” para intentar que la planta langreana recupere la actividad. Estas labores encaminadas a encontrar nuevos proyectos son desarrolladas por la consultora Lee Hecht Harrison. Además, la Consejería de Industria, resaltó Fernández, “presta colaboración con el objetivo de que la planta pueda albergar nuevamente actividad que asegure la generación de empleo y capacidad industrial”.

La pregunta trasladada por Podemos se centró en las acciones que se están desarrollando para que la planta de Vesuvius en Langreo pueda retomar su actividad, al igual que lo hizo la factoría ubicada en Miranda de Ebro. Las instalaciones de Riaño tienen una superficie construida de 6.600 metros cuadrados en una parcela de 27.000 metros cuadrados.

La planta de la multinacional anglosajona estaba dedicada a la fabricación de productos refractarios. El Principado apuntó a principios de año al primer semestre de 2021 para que las instalaciones tuviesen nuevos dueños, con una cifra de empleo “similar” a la que tenía cuando cesó la actividad. En aquella época se sobrepasaba el centenar de trabajadores. En diciembre de 2020 –tras la reunión de grupo de trabajo para reflotar la actividad, en el que están incluidos miembros del Gobierno regional, de los sindicatos y de la propia Vesuvius– ya se había puesto sobre la mesa que podría haber una oferta de compra “en semanas”.

El grupo británico Vesuvius anunció a principios de septiembre de 2019 a la plantilla la intención de presentar un expediente de regulación de empleo (ERE) de extinción. En 2009, veinte años después de iniciar su actividad en Langreo, la dirección comunicó su intención de clausurar la factoría durante dos años, una medida que los trabajadores vieron como el anticipo de un cierre definitivo. Se convocaron entonces movilizaciones y la medida se paró. En 2019, la empresa aludió a la crisis del acero para aplicar la clausura, que la plantilla consideró injustificada al obtenerse “beneficios récord” en los últimos años.

Compartir el artículo

stats