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Los pueblos de las Ubiñas llevan siete años sin mejoras por la falta de un plan gestor

Los ayuntamientos no optan a ayudas para actuaciones de calado desde la anulación del IGI, que también frena las licencias de obra a los vecinos

El pueblo de Tuiza, en el parque de las Ubiñas.

Malos tiempos para las Ubiñas. El parque natural lleva cerca de siete años sin grandes obras en los pueblos por falta de subvenciones. Los ayuntamientos de Lena, Quirós y Teverga –los municipios con territorio dentro del parque– no pueden acceder a las asignaciones directas, al carecer de un Instrumento de Gestión Integral (IGI). Las administraciones locales han perdido ya más de 600.000 euros. Además, también por la falta de gestión, los trámites para ejecutar obras particulares son cada vez más complicados: “Tardan hasta tres años en dar licencia para cambiar una triste portilla”, denunciaron vecinos de la zona.

Los problemas con la gestión del parque vienen ya de lejos. El Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) que estaba en vigor en 2015 fue denunciado por vecinos de Teverga, al carecer de puntos clave para ajustarse a la normativa vigente. El juzgado les dio la razón y obligó al Principado a elaborar un nuevo documento. Fue entonces cuando se aprobó el último Instrumento de Gestión Integral (IGI) de las Ubiñas-La Mesa. Estuvo en vigor unas semanas, hasta que se presentó una nueva denuncia por parte de dos parroquias de Teverga.

De nuevo, alegaron una serie de “irregularidades” en el documento. El Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) aceptó una de ellas: la falta de memoria económica. Desde entonces, el parque natural está totalmente a la deriva.

“No hay una normativa clara y esto dificulta los trámites a los vecinos”, señaló la representante del parque en la vertiente lenense, Auri Villar. Tanto es así que, incluso las obras más ligeras, pasan por largos trámites: “Vas de una ventanilla a otra, las licencias de obras se eternizan”, explicaron. También temen por la protección de los montes y de la fauna salvaje: “No hay una limitación clara del espacio, ni restricciones. El mantenimiento del espacio protegido está en manos de la buena voluntad de los vecinos”, destacó Villar.

Una “buena voluntad” que no se ve recompensada. Las Ubiñas-La Mesa lleva cerca de siete años, desde la anulación del último PRUG, sin obras en los pueblos. “Sí hay actuaciones, pero de menor calado. Las que pueden permitirse los ayuntamientos”, señaló Villar. Solo por pertenecer al parque natural, con un IGI en vigor, cada ayuntamiento recibiría 30.000 euros anuales. Esto suma los más de 600.000 euros que se han perdido Lena, Quirós y Teverga en los últimos siete años.

Esta cifra, apuntan desde el Ayuntamiento de Lena, es un cálculo muy a la baja. “No refleja todas las ayudas a las que podría tener acceso la Administración local, como por ejemplo las subvenciones de la Unión Europea para los espacios protegidos”, explicaron responsables municipales. Estiman, aunque matizan que es solo una aproximación, que las pérdidas superan ya el millón de euros.

La aprobación del IGI de las Ubiñas, por el momento, no tiene fecha. El Gobierno del Principado anunció, tras el fallo que tumbó el documento, que la tramitación sería muy rápida: el documento solo requería unos cambios puntuales. En 2019, se anunciaron novedades para el parque: posibilidad de acampar y protección del perro pastor, entre otras. Desde entonces, no hubo más noticias.

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