Fue un accidente, nada de vandalismo, “ni siquiera una travesura”, aseguran desde el Ayuntamiento de Langreo, pero la escultura homenaje a Luis Adaro y Magro, conocida como “La Carbonera”, erigida por suscripción popular en 1918 en el parque Dorado de Sama ha perdido una parte. La mujer que recoge carbón de una vagoneta en la escalinata de la pieza ha perdido su mano derecha.

Desde el Ayuntamiento de Langreo explicaron ayer que todo sucedió cuando unos niños, de entre ocho y diez años de edad, que estaban jugando junto a la escultura provocaron, “sin ninguna intención y de forma accidental”, que se desprendiese la mano de la carbonera.

La Policía Local de Langreo acudió de inmediato al parque Dorado y comprobó que la mano se había roto a la altura de la muñeca, justo en la unión con los ropajes de la mujer. Los agentes hablaron con los pequeños y sus padres y se quedaron con sus contactos por si se debían hacer más diligencias. En ningún caso se culpa a los pequeños de haber querido ocasionar el en ningún momento el daño a la escultura, insisten desde el Ayuntamiento.

Los agentes de la Policía Local que se trasladaron a la zona se llevaron la pieza que se había desprendido por lo que la mano está en dependencias policiales. Mañana mismo los técnicos municipales comenzarán los trabajos para ver cual es la mejor forma de que la mujer vuelva a tener su mano “lo antes posible”.

La escultura, obra de Coullaut Valera, es una pieza destacada del arte público en Langreo.